Amapolas

El peligroso turismo blanco en los campos de amapolas de Castilla

En España existen 528 cultivos legales de amapola blanca. Su localización es secreta. En total son unas 11.000 hectáreas de las que se recolectan más de 100 toneladas al año, convirtiéndose en el mayor productor legal de opio del mundo. Una planta medicinal cuyo peligroso látex ha acabado con la vida de dos personas por su consumo ilegal.

"Llevo viendo amapoleros desde hace más de 10 años", nos comenta Javi, un agricultor de la provincia de Toledo que lleva más de 20 años dedicado al campo. Desde lo alto de su tractor ha observado el trasiego de los amapoleros, sobre todo, a partir de la segunda quincena de mayo. Asegura que muchos de ellos llegan en 'roulottes' y permanecen varios días por la zona. Primero observan cómo de madura está la planta y esperan el momento óptimo para recolectar su látex.

La amapolablanca, conocida también como adormidera u opio, es una planta medicinal. En España tan solo una empresa privada tiene la autorización para el cultivo y el posterior tratado de la planta de la que extraen alcaloides como la morfina o la codeína.

Los agricultores de la zona aseguran que los amapoleros ya no necesitan entrar en las fincas de los cultivos legales ya que las semillas se expanden por los alrededores y las pueden encontrar en las lindes, cunetas o baldíos de manera silvestre.

Los amapoleros llegan de todas partes de Europa. Muchos de ellos son consumidores propios y otros son traficantes de opio que en su gran mayoría se acercan hasta los campos de Castilla para hacer su recolecta ilegal. A raíz de este vaivén, conocido como el 'turismo blanco', la Guardia Civil de la provincia de Toledo, organiza batidas de vigilancia en los campos de cultivo, y aseguran que la mayoría de los amapoleros permanecen en torno a 15 o 20 días por la zona.

Acompañamos a la Guardia Civil en una de sus batidas de vigilancia por los campos de cultivo de Toledo. Descubrimos una zona que acaba de ser saqueada por los amapoleros ilegales: muchos de los frutos tienen cortes por los que se ha extraído su codiciado látex.

Inspeccionando un poco más esa zona descubrimos, bajo una retama, herramientas que los amapoleros acaban de utilizar para extraer el látex. Dos botes de conservas vacíos con un cordón cada uno, seguramente para colgarlos al cuello mientras recolectan. También hay un cuchillo y tres cuchillas muy rudimentarias, realizadas por ellos mismos. El interior de los botes de conservas todavía tienen el fuerte olor que desprende el látex de la adormidera cuando se seca.

El consumo ilegal de esta planta ya ha matado a dos personas de origen europeo en los propios campos. Es el caso de Ryan de 32 años que falleció tras sufrir una intoxicación letal al succionar plantas que crecían en un campo silvestre. La otra víctima, Pasquale, fue hallado tumbado en el suelo de un campo de amapola blanco tras morir por una asfixia y entre convulsiones