Crónica | Los comienzos
La infancia de Joaquín Sánchez: El Puerto de Santa María, su familia y su primer club de fútbol
Joaquín Sánchez se ha emocionado al regresar al lugar en el que creció, el Puerto de Santa María, allí se ha reencontrado con su padre Aurelio y su hermano Ricardo y juntos han repasado las anécdotas más bonitas de su infancia.
La plazoleta se convirtió en el lugar de juego de Joaquín Sánchez durante sus primeros años de vida. Allí, el futbolista se ha encontrado con su vecina Milagros quién recuerda la tierna niñez del capitán bético, desde su lactancia hasta los seis años al miedo que tenía a la policía.
El protagonista de ‘La penúltima y me voy’ ha confesado su vocación frustrada en la niñez, Joaquín Sánchez quería ser torero, un sueño que su madre procuró que no cumpliera y que el futbolista relata con cariño, “yo cogía la toalla y la espumadera y me cuadraba, tenía el sofá de casa lleno de agujeros”.
“Mi madre es muy especial para todos”
Para el futbolista, su madre es uno de los pilares más importantes de su familia, una mujer que tuvo a ocho hijos y cuya vida ha dedicado al cuidado de sus retoños. Joaquín y su hermano Ricardo recuerdan con humor cómo era la convivencia en casa a la hora de organizarse, “se liaba” aseguran los hermanos Sánchez.
El capitán del Betis aparece en el club Los Frailes, el equipo que le vio nacer como futbolista. Joaquín sorprende a los niños del equipo cantando el himno del club y disfruta con ellos durante el entrenamiento.
En Los Frailes, Joaquín tuvo un entrenador muy especial, Rogelio ‘Kiki Cruiff’, quién repasa con el futbolista sus anécdotas cuando empezó a jugar al fútbol, “hacía virguerías desde los siete años” confiesa el primer entrenador del gaditano.
“Mi tío El Chino me daba 1.000 pesetas por cada gol que marcaba”
El recuerdo de su tío El Chino hace que Joaquín no pueda contener las lágrimas. El futbolista cuenta cómo su tío le daba 1.000 pesetas cada vez que metía un gol y vuelve al muro en el que pasaba horas junto a El Chino mientras le cantaba una canción.
Joaquín queda con su padre Aurelio y su hermano Ricardo en el bar de El Puerto de Santa María dónde recuerdan los inicios futbolísticos del capitán del Betis.
Su padre acaba revelando que “Ricardo era mejor jugador que Joaquín” ante las risas de los hermanos Sánchez. Así ha sido el recorrido por la infancia de Joaquín Sánchez en El Puerto de Santa María.