Un toque ppicante
Conquista con la receta de calamares bravos de Joseba Arguiñano
El hijo de Karlos Arguiñano ha elaborado un plato con un toque picante perfecto para entrar en calor en los días de baja temperatura.
Ingredientes (4 -6 p.):
2 calamares frescos grandes (limpios)
1 huevo
9 cucharadas de harina de garbanzo (6 +3)
25 g de hojas de albahaca
25 g de hojas de perejil + perejil para decorar
1 cucharada de levadura química
100 ml de agua
Aceite de girasol
Sal
Para la salsa brava:
1 huevo
Sal
Zumo de media lima
1 cucharada de salsa sriracha
1 cucharada de mostaza
Aceite de oliva virgen
6-8 guindillas en vinagre (sin tallo ni semillas)
1 cucharadita de ajo en polvo
Perejil picado
Elaboración:
Para la salsa pon el huevo en un vaso batidor, agrega el zumo de lima, la salsa sriracha, la mostaza, 1 cucharada de aceite, las guindillas picadas, el ajo en polvo, una pizca de sal y 1 cucharadita de perejil picado. Tritura los ingredientes con una batidora eléctrica y reserva la salsa.
Para el rebozado, pon el huevo, 6 cucharadas de harina de garbanzos, el perejil, la albahaca, la levadura, el agua y una pizca de sal. Tritura los ingredientes hasta conseguir una masa homogénea.
Corta los cuerpos de los calamares en aros y los tentáculos en 4. Pásalos por la harina de garbanzos (las otras 3 cucharadas) e introdúcelos en la masa para rebozar.
Calienta abundante aceite de girasol en una sartén. Cuando esté bien caliente, introduce los calamares (a tandas) y fríelos hasta que se doren. Retira y escúrrelos sobre un plato cubierto con papel absorbente de cocina. Repite el proceso con el resto de los calamares.
Sirve los calamares, acompáñalos con la salsa brava y decóralos con unas hojas de perejil.
Consejo:
No dudéis en utilizar harina de garbanzos porque es perfecta para las frituras, y además es apta para celiacos.
En la cocina vegana se mezcla con agua y se utiliza como sustituto del huevo.