¡Imperdible!
Receta de cachopo de ternera de Karlos Arguiñano, un "pedazo de plato en toda España"
Karlos Arguiñano elabora uno de los platos insignia de Asturias que se puede encontrar en todo el país: un delicioso cachopo de ternera relleno de cecina en lugar de jamón.
Uno de los platos insignia de Asturias, que ha acabado extendiéndose al resto de España, es el cachopo. Karlos Arguiñano ha elaborado una deliciosa receta de cachopo de ternera con una pequeña variante: en lugar de rellenarlo con jamón ha usado cecina. Un plato, sencillamente, delicioso. ¡Pruébalo tú mismo!
Ingredientes, para 4 personas
4 filetes de ternera cortados tipo librillo (de 220 g cada uno)
8 lonchas de cecina
4 lonchas de queso
12 pimientos de piquillo
2 dientes de ajo
150 g de hojas variadas de lechuga
Harina, huevo batido y pan rallado (para rebozar)
Aceite de oliva virgen extra
Vinagre
Sal
Pimienta
Perejil
Elaboración
Calienta una sartén con 3 cucharadas de aceite. Pela los dientes de ajo, lamina y agrégalos. Cuando empiecen a dorarse, añade los pimientos. Sazona y cocínalos a fuego suave durante 20 minutos aproximadamente.
Extiende un filete (abierto) sobre la encimera y salpimiéntalo por la parte interior. Cubre uno de los lados con 2 lonchas de cecina y 1 loncha de queso cortada por la mitad. Tapa el relleno con el otro lado del filete, presiónalo un poco, salpimiéntalo por fuera y resérvalo. Repite el proceso con el resto de los filetes, cecina y queso.
Pasa los filetes por harina, huevo batido y pan rallado.
Calienta una sartén grande con aceite. Agrega un filete y fríelo durante 2-3 minutos por cada lado para que le llegue el calor a la parte interior y se dore por fuera. Retira y escúrrelo sobre una fuente cubierta con papel absorbente de cocina. Fríe el resto de los filetes de la misma manera.
Aliña las hojas de lechuga con aceite, vinagre y sal.
Sirve en cada plato, 1 cachopo, 3 pimientos y una porción de ensalada. Adorna los platos con unas hojas de perejil.
Consejo
Para que los filetes no se encojan al freír es importante que no tengan telillas en los bordes. Para que queden más lisos puedes golpearlos con un mazo antes de rellenarlos.