Denuncia

Vanessa, víctima de la clínica de cirugía denunciada en Málaga: "El cirujano me arrancó toda la postilla del pezón en una cura"

Vanessa quería recuperar su silueta después de engordar más de 30 kilos tras una depresión. Sin embargo, la cirugía que se realizó en una clínica de Málaga le ha provocado serias malformaciones en su anatomía. Otras 14 mujeres denuncian mala praxis del centro.

Cuando Vanessa acudió a esta clínica de medicina y cirugía situada en Málaga estaba cargada de ilusión por verse mejor. Después de pasar por una depresión engordó hasta 30 kilos. Su deseo era el de mejorar y recuperar su figura.

Sin embargo, la operación no fue lo que esperaba y la cirugía le ha provocado serios desperfectos en su anatomía. Hasta 14 mujeres denuncian hacer sufrido desastres quirúrgicos por la mala praxis de esta clínica. En algunos casos se trata de lesiones irreversibles.

Vanessa quería realizarse una maxtopesia y una abdominoplastia con liposucción 360. Una intervención para la que llegó a pagar hasta 16.000 euros.

En uno de sus pechos tiene una cicatriz de 2 centímetros de grosor, así como en uno de sus pezones. Cuenta que durante una de las curas el cirujano le quitó la postilla al pezón diciéndole que lo que al cuerpo no le gustaba lo rechazaba. A raíz de eso se le abrió la herida. En el abdomen tenía un boquete de 3 centímetros de ancho muy profundo y seromas por todo el abdomen. El más grande que tiene es uno del ombligo de 13 centímetros por dos de ancho.

A Vanessa la operó un cirujano que no era quien ella contrató

Le dijeron que la iba a intervenir un doctor al que no llegó a poner cara. Ella se dirigió a esta clínica por la fama del cirujano Jairo Robledo. Seconocieron mediante una videollamada en la que también estaba presenta la directora médica del centro, que ahora ha descubierto que no tiene titulación.

Vanesa pidió opinión hasta a 4 cirujanos. Uno de ellos fue quien la operó de los glúteos hace 4 años. Una intervención de la que se recuperó sin problemas y con la que quedó muy satisfecha. Este cirujano le dice que no puede operarla porque necesita bajar de peso. Una observación que realizan más facultativos. Sin embargo, en la clínica Nikki Reina le dicen que la operarán aunque no baje de peso.

El cirujano que operó a Vanessa no tenía reconocido el título de medicina en España

Vanesa conoce al cirujano que ella creía que la iba operar entre 7 y 10 días antes de operarse. "Hablo con él. Me pinta, me explica cómo va a ser la operación, cuánto tiempo dura. Le explica a mi marido el tiempo que va a durar, cuánto tendré que estar en observación", cuenta. Sin embargo el día de la operación surge un imprevisto. "Entra en la sala de observación y me dice que primero tiene que hacer una lipo de papada que no pudo hacer el día anterior", señala. Supuestamente a ella le opera el doctor Jairo Robledo pero quien firma la operación es Fernando de Valdés. Posteriormente ha sabido que Jairo Robledo no tiene reconocido su título de médico en España.

Para Vanessa mirarse ahora al espejo se ha convertido en una tortura. Muchas veces se ve el pecho porque no le queda otro remedio pero el abdomen no se lo mira y cuando se está duchando ni se toca esa zona. Apunta además que en todo momento ella comunicó que era alérgica a un antibiótico y en los informes no se ha reflejado esa alergia medicamentosa. "Cuando yo estaba sedada me podían haber puesto ese medicamento perfectamente", lamenta.

El propósito de Vanesa ahora mismo es perder el peso que necesita y después armarse de valor para volver a entrar en un quirófano porque su recuperación fue muy mala y tiene miedo.