Una tercera persona podría estar interesada en sembrar la duda en la relación de Amaia Salamanca y Rosauro Varo: "Se la han jugado"

Esta semana la revista Lecturas ha abierto su portada con unas fotografías de Rosauro Varo, marido de Amaia Salamanca, junto una joven. Una instantánea acompañada del titular: 'Amaia Salamanca y Rosauro, vidas separadas'. Luis Pliego, director de la revista, daba detalles de la portada y contaba que en ese plan Rosauro estuvo acompañado por la joven y por otra pareja con los que navegó por el Guadalquivir y después compartió velada en su palacete de la capital hispalense. En las instantáneas no se ve ningún gesto que evidencie una relación sentimental entre ellos aunque Pliego señalaba que se notaba que Rosauro estaba más pendiente de esta chica de las fotografías que del resto del grupo.

Gema López, periodista y colaboradora de Espejo Público, cuenta que ayer tras emitir esta información, recibe varias llamadas y le alertan de que tras estas fotos podría existir una encerrona y una traición. "Alguien podría estar usando a Rosauro para que este fuera fotografiado", mantiene.

Afirma la periodista que ningún profesional de la prensa de Sevilla ha hecho estas fotografías. En el caso de que los autores sean fotógrafos de fuera la pregunta es qué fotógrafo le sigue desde Madrid y en busca de qué. "Las agencias no se atreven a hacer estos desplazamientos si no hay un tema", señala.

"Son fotografías muy difíciles de conseguir si no se sabe realmente que va a estar ahí"

Espejo Público ha hablado con Pablo González, paparazzi que trabaja en Sevilla. Mantiene que no sabe quién habrá realizado el reportaje. Cree que podrían estar siguiéndole desde Madrid o que haya sido un chivatazo intencionado. Les llama la atención que hay fotografías muy difíciles de conseguir si no se sabe previamente que van a estar allí y esas son las que se le realzan entrando en la casa. "Una vez que han pasado 13 años de casado con Amaia, ¿quién le hace guardia a Rosauro? A Rosauro se la han jugado", afirma.

El entorno de Rosauro niega la crisis y asegura que esto no pone en riesgo la relación. Insiste López en que "podría haber una persona que hubiera dado el chivatazo que podría querer dinero o vengarse de Rosauro por algo personal",