Teresa Ribera: "No es un capricho, lo que sería triste es que nos quedásemos sin el confort en nuestros hogares"

El Gobierno ha dado a conocer ya su plan de ahorro energético para cumplir con el compromiso adquirido con Europa para reducir el 7% del consumo de gas. El grueso de este paquete de medidas pasa por ajustar el termostato a 26 grados en verano y a 19 grados en invierno, así como apagar la iluminación de los edificios públicos a partir de las 22:00 horas que no estén habitados.

La vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, ha explicado en Espejo Público las medidas aprobadas este lunes por el Consejo de Ministros. Ribera reconoce que "son medidas que chocan porque estábamos acostumbrados a tener una relación muy ligera y muy conveniente con la energía, según íbamos considerando que por razones de estética o iluminación nos pareciera más adecuado, pero lo cierto es que estamos en una situación muy complicada, que nos ha llevado a ponernos de acuerdo a nivel europeo sobre cómo ofrecer nuestra solidaridad, contribuir a que haya más energía para otros que, en estos momentos tienen mas dificultades a acceder a la energía".

Ribera defiende las medidas anunciadas y considera que "se trata de ajustar nuestra comodidad, nuestro estilo de vida en una pequeña parte en comparación con el gran problema que tienen nuestros vecinos. Se trata de una medida de solidaridad con la que nos hemos comprometido, se trata de pensar que no queremos en ninguno de los casos que Putin se salga con la suya".

La ministra rechaza que el resultado sea el de ciudades tristes y oscuras y responde que "lo que sería enormemente triste es que nos quedásemos sin el confort en nuestros hogares", además añade: "no se trata de un capricho".

De nuevo con el enemigo bien identificado, Vladimir Putin, Ribera advierte de que "la enorme tristeza que sentiríamos si Putin se sale con la suya no será comparable con el hecho de que algunos de nuestros edificios públicos desocupados apaguen la luz antes".

Preguntada por la negativa ya anunciada por Isabel Díaz Ayuso, la vicepresidenta tercera se ha limitado a decir que "cada cual se retrata con sus palabras y sus hechos".