Raquel, la mujer que denuncia al exconcejal de Ponferrada por dejarla tetrapléjica: "Sientes un miedo aterrador que te atenaza el alma"

La Audiencia Provincial de León ha celebrado el juicio contra Pedro Muñoz, exconcejal de Ponferrada, por violencia de género. El exconcejal estaría acusado por supuestamente lanzar por la ventana a su expareja, Raquel, que quedó tetrapléjica, así como de agresiones sexuales, físicas y psicológicas.

Raquel ya había pedido auxilio en marzo de 2018. Ese año llamó al 112 durante una de las palizas que recibió de su pareja. Sin embargo, aquella llamada se archivó como 'ruido entre vecinos' y nadie acudió en su auxilio. Asegura la víctima que su presunto maltratador ya le había advertido que tenía contactos muy poderosos y de que nada le valdría pedir ayuda.

"En Ponferrada todo el mundo había oído rumores de que había malos tratos en la pareja"

Susana Martín es la periodista que ha seguido el caso desde el principio. Asegura que en Ponferrada mucha gente había oído rumores de que había malos tratos en la pareja pero nadie la ayudó. Las hijas del presunto maltratador llegaron a contar cómo su madre había sufrido un calvario de malos tratos y en su momento ayudaron a Raquel, sin embargo ahora en el juicio le dieron la espalda.

"Sueño con un centro adecuado a mis circunstancias"

La propia Raquel ha grabado un vídeo para contar cómo está viviendo este momento después de años esperando a que se celebre el juicio. Se siente muy aliviada porque pasar por el trance de declarar le generaba mucha tensión. Se siente más relajada y tranquila porque "todo está yendo por el camino de la verdad" y eso le hace sentir tranquila. Se plantea una nueva vida encontrando un centro adecuado a sus circunstancias ya que en los últimos años ha deambulado entre centros de ancianos y de enfermos mentales.

Quiere ayudar a otras víctimas de violencia de género que se han quedado postradas en una silla de ruedas como ella y "con un miedo aterrador que les atenaza el alma". Si Raquel, que trabajaba como abogada de oficio y llevaba muchos casos de violencia de género, no denunció era porque asegura que su pareja le amenazaba y tenía miedo que le hiciera algo a sus seres queridos. Le decía que tenía mucho poder y podía destruirles. Considera que la violencia de género "en un estado como el nuestro es la lacra con mayúsculas".

"El le dijo que tenía amigos muy poderosos y que no le serviría de nada llamar al 112"

Una de las presuntas agresiones llevó a la víctima a llamar al 112. Cuenta que el motivo fue que encima de la televisión tenían una fotografía íntima de los dos y Raquel la había enrollado y la había bajado al trastero porque le daba pudor que la vieran otras personas. Ese motivo provocó una explosión de irá en el presunto agresor, según relata Raquel, y ello provocó la llamada al 112. Sin embargo aunque pidió auxilio la llamada se archivó como "ruido de vecinos".