El 2014, no empieza bien para los bolsillos de muchas familias españolas. En cuanto suenen las campanadas habrá cosas por las que tendrán que pagar más. La luz, el transporte, los peajes y la gasolina suben. Las pensiones ya no se van a revalorizar con el IPC y los sueldos de los funcionarios y el Salario mínimo, quedan congelados.