La Magdalena

Un pueblo de León carga contra el cura "sin empatía" que no deja hablar en los entierros ni permite comulgar a niños sin padres casados

Los vecinos de la Magdalena no pueden más y piden que se eche al párroco de la Iglesia que lleva 14 años ejerciendo de una forma desagradable sin tener empatía con los feligreses.

El alcalde de la Magdalena está recogiendo firmas contra su párroco, los vecinos no pueden más, están en contra de él y han recogido 2.400 firmas y nos dejan declaraciones como estas: "Es un cretino, me parece el peor sacerdote que he visto en mi vida. No tiene empatía, es desagradable". "Lleva catorce años haciendo feos, se cree que la Iglesia es de él y le da igual lo que le digan. Él está por encima de todo Dios." "Que lo echen de aquí ya, porque es un sinvergüenza."

Todo viene a raíz de un entierro, un joven de 24 años tiene un accidente, lo entierran y durante la misa la familia quería hablar, quería darle el último adiós pero el cura no dejó participar a nadie exceptuando a la novia que acabo callándola. Aunque es evidente que no es sólo por esta circunstancia, este hecho fue la gota que colmo el vaso e hizo que los vecinos del pueblo decidan movilizarse para echar a este cura de la parroquia.

Conexión en directo con Silvia desde la Magdalena

Nuestra reportera Silvia está con los vecinos de esta localidad leonesa que han querido manifestar ese desacuerdo que tienen con el sacerdote sobre todo después del episodio que se producía en la Iglesia con el funeral de Ángel, el joven de 24 años. Hoy María, la madre de Ángel nos cuenta cómo se siente: "Lo que ocurre en el funeral es que su novia Paula y yo queríamos decir unas palabras para despedir a Ángel y agradecer a la gente todo lo que a hecho por él porque habían venido todos sus amigos y el cura no nos lo permitió, nos dijo que saliéramos a la calle a decir las palabras que la homilía era de él y que no podíamos dirigirnos a la gente... Luego después el cetro salió y el párroco no le acompañó hasta la funeraria lo dejo solo".

Los medios de comunicación hemos recibido una nota del obispado donde explican que fue una confusión, que todo se debió a un comentario que hizo el sacerdote diciendo que esta situación tan triste y dolorosa como es la despedida de un chico de 24 años a nadie le gustaba hablar de esta situación por el propio dolor pero sí que nos explicaban en esta nota que la novia tuvo la oportunidad y precisaban que había sido en el púlpito con micrófono. Pero María afirma que esto no ocurrió así: "Paula se puso al lado del féretro, leyó la carta de despedida para Ángel y yo ya no me pude despedir de mi hijo, ni agradecer a la gente que es lo único que quería decir."

Además el sacerdote no se puso en contacto con la familia en ningún momento: "Ni el sacerdote, ni el obispado, es un hombre que carece de empatía, carece de corazón y vamos... Desde luego yo no quiero que esto le vuelva a suceder a ninguna familia".

María no entiende por qué el sacerdote no la dejo hablar ni a ella, ni a su familia, ni a la gente que se quería despedir de su hijo: "Yo siempre que he ido a un funeral, la gente que se quiere despedir, que quiere agradecer siempre se ha podido subir y con este señor es imposible, ha sido tristísimo todo...". En estos catorce años que el cura lleva en el pueblo ha habido infinidad de episodios desagradables, María afirma que otro episodio que tiene a todos los vecinos enfadados es que según lo este párroco niega la comunión a los niños que no tienen a sus padres casados.

El cura tiene 80 años, lleva ejerciendo catorce años y esta es la primera vez que se hace una manifestación con tantas protestas. Los vecinos no pueden más y están muy descontentos con el obispado: "El obispado ha emitido un comunicado donde miente, porque afirman que pudimos hablar y eso no es así." Los habitantes de este pueblo de León quieren dejar claro que el comunicado no va en contra de la Iglesia, lo único que buscaban en el entierro de Ángel es que se le pudiese recordar y que hablasen todas las personas que le querían. No se habla de que sea algo católico o no católico, es algo humano que no les dejaron hacer y por eso piden que se eche a este párroco de la Magdalena.