La Policía húngara se emplea con dureza contra los refugiados
La situación en la que se encuentran miles de refugiados en los campos de Hungría es desoladora. Sin atención médica, sin los servicios básicos, rodeados de basura y solo atendidos por voluntarios. Ya se han producido enfrentamientos y la la policía se emplea con dureza con gases lacrimógenos para controlar a los refugiados que no quieren que les fichen.