Polémica por los precios del menú en el Congreso: ¿Sufren los políticos las subidas de precios?

¿Vivimos la misma realidad los ciudadanos de a pie y los políticos?

Probablemente esa pregunta se la habrá planteado mucha gente tras muchas idas y venidas de la clase política sobre muchos asuntos.

El periodista de Espejo Público Miquel Valls sometía a examen a los compañeros presentes en plató la mañana de este jueves. La primera pregunta era el precio medio de un menú del día en un restaurante de la ciudad de Madrid. No acertaba ninguno, siendo Susana Griso la que más se acercaba tras cambiar de parecer. Todos se quedaban ligeramente cortos. La respuesta, 14 euros.

Si salimos de la capital de España, lógica nos puede llevar a pensar que el precio sería algo inferior, pero ¿y si nos preguntan por el precio del menú de medio día de un hospital de Sevilla?

Tampoco acertaba ninguno de los colaboradores del programa, aunque algunos no iban desencaminados, pero en esta ocasión la que se quedaba más lejos era Susanna. A la hora de tener que comer en la cafetería de un centro hospitalario de la ciudad a orillas del Guadalquivir, el desembolso por un menú de mediodía sería de 9 euros.

El siguiente lugar por el que el periodista consultaba a sus compañeros era un tanatorio en Barcelona. EL negocio de la muerte también parece alcanzar la gastronomía de la Ciudad Condal. Hasta el momento el momento el tanatorio sería el lugar más caro, cosa que se imaginaban los colaboradores, aunque se quedaban cortos todos a excepción del periodista Rubén Amón, que imaginaba un precio medio de 18€, siendo la respuesta correcta 16€.

El precio ¿justo?

La cuestión que levantaba cierta polémica sería la siguiente: ¿Cuánto pagan los miembros del Congreso de los Diputados por el menú diario de su restaurante?

Susanna Griso afirmaba conocer la respuesta y pedía que no la copiaran. Rubén Amón, que respondía 12€, acusaba a Juan Soto Ivars y a Ángel Antonio Herrera de hacer trampas: "¡Qué listos sois!", les espetaba, mientras ellos se reían.

Susanna suponía que el importe estaría entre los 6 y los 7 euros, y los dos 'tramposos' daban la misma respuesta de 6€.

La respuesta, 6,45 euros, cifra que representaba, con diferencia el menú del día más económico de entre los presentados, y quién sabe si de todo el país.

Numerosas críticas

La calidad es desconocida para la mayoría, que no ha tenido el privilegio de degustar el menú de las Cortes. Eso sí, consta de primer y segundo plato, así como bebida y postre. Pese a que recientemente el menú político habría subido de precio, resulta sorprendentemente barato para todo el que conoce su precio.

La calle daba su opinión frente a la cámara: "Horrible, me parece horrible, una vergüenza", expresaba un ciudadano visiblemente indignado.

Otro ciudadano valoraba como "muy desequilibrado" el precio del menú, y más aún si se tienen en cuenta las "jugosas" dietas que cobrarían, añadía.

A un jubilado le parecía directamente "una animalada", que el resto tengamos que asumir preciso mucho más caros, mientras ellos comerían "casi gratis".

Otro transeúnte recordaba el hecho de que "cada legislatura se suben el sueldo", aceptando el hecho con resignación: "Son privilegiados".

Parece que en la calle estaría bastante extendida la idea de que la clase política tendría privilegios propios de una especie de nobleza del siglo XXI, sin entender muy bien por qué.