Personas mayores

Ocho ancianos muertos por salmonelosis en una residencia de Barcelona: "Se les negó la atención sanitaria"

El brote de salmonelosis ocasionó la hospitalización de 15 ancianos y el fallecimiento de otros 8. Ahora el centro geriátrico está acusado de conducta irresponsable por negar el brote y suministrar medicamentos para ocultar los casos.

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Entre agosto y septiembre de 2022ocho personas murieron en una residencia geriátrica por una intoxicación de salmonella. La Fiscalía Provincial de Barcelona ha denunciado ahora ante el Juzgado de Instrucción 17 de la ciudad condal al centro de mayores donde se dio el brote.

Según la denuncia de la fiscalía, "los responsables del geriátrico con su conducta irresponsable colocaron a todos los residentes en una situación de grave riesgo sanitario: minimizando la importancia del brote, negando los casos y suministrando medicamentos para ocultar los casos".

Se realizaron 3 inspecciones sanitarias

Tras el brote se realizaron tres inspecciones sanitarias en las que se evidenció la falta de higiene del centro, pero no se tomaron medidas drásticas. La fiscalía ha demostrado que los meses posteriores la situación continuó y no se solucionaron los problemas de higiene. Ahora se ha pedido el cierre del geriátrico, pero el juez se ha negado porque lo considera "precipitado".

Jesús Albalat, periodista de 'El Periódico' ha confirmado para Espejo Público que durante las inspecciones de sanidad se encontraron lavabos muy sucios, sillas de ruedas tiradas en el suelo, sillas adaptadas para las duchas con suciedad marrón, suelos sucios, pomos de las puertas pegajosos, piezas de ropa sucias sobre los radiadores, ausencia de productos de desinfección...". El periodista no se explica cómo la situación pudo continuar sin que se tomaran medidas: "Si hubo tres inspecciones... ¿Qué hizo la administración?".

Protestas frente a la residencia

Este jueves mucha gente se ha reunido en la puerta de la residencia para protestar por este caso, y por todos los maltrataos que se producen en las residencias por la "gestión privada", según ha comentado una de las manifestantes.

"Es una cuestión de derechos humanos. Las víctimas se vieron obligadas a morir de forma indigna, se les negó la atención sanitaria", se ha lamentado la mujer. Si los casos hubieran sido tratados en vez de ocultarse, el brote no hubiera dejado tantas víctimas.

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