ENCUENTRAN RESTOS DE ACELERANTE
Nuevas pruebas y otro informe psiquiátrico incriminan más a José Bretón
José Bretón se enfrenta a dos nuevas pruebas que pueden incriminarle todavía más en la desaparición y muerte de sus dos hijos, Ruth y José. Por un lado, un nuevo informe psiquiátrico determina que no sufe trastornos mentales. Por otro, se han encontrado restos de acelerante en trozos de tela y un botón de la ropa de los niños.
José Bretón no sufre ningún trastorno mental. Ni su conciencia ni su memoria se vieron alteradas el día de los hechos ni los previos a la desaparición de los niños. Son las principales conclusiones de un nuevo examen psiquiátrico ordenado por el juez del caso y realizado por dos forenses del Instituto de Medicina legal de Córdoba. El objetivo era analizar a Bretón ahora con el peso de la imputación por doble asesinato sobre sus hombros. Pero poco ha cambiado.
Según los facultativos que ya examinaron a Bretón el pasado mes de enero, sus marcados rasgos de personalidad no han tenido por qué influir para asesinar presuntamente a sus hijos. Un carácter manipulador y una inteligencia por encima de la media no son motivos que alteren, según los forenses su capacidad de entender y su voluntad.
En esta segunda entrevista con los psicólogos, Bretón se muestra menos amable y colaborador. Su única forma de salir del paso de las graves acusaciones es asegurando que hay una teoría de la conspiración contra él orquestada por el juez, la policía, los forenses y los psiquiatras. Profesionales a los que acusa de ser totalmente imparciales y que le condenaron desde el primer día.
Asisimismo, según se desprende de la investigación policial, se han encontrado restos de acelerante en un botón y un trozo de ropa hallados en las Quemadillas, así como una garrafa de gasolina en la finca. Una prueba más de que no existe el crimen perfecto.