Los mandamientos de 'San' Agustín Pantoja: Las condiciones impuestas a Isabel y Mariló

Desde hace meses es de sobra conocida la amistad que une a Isabel Pantoja y a María Dolores (Mariló) de la Rubia. Mariló regenta una clínica oftalmológica privada en Córdoba y trata siempre de evitar a toda costa a la prensa y sus preguntas.

Un enfado

Desde hace meses se habrían cumplido una serie de patrones que poco a poco se han ido estableciendo como fijos. Aparentemente un reciente enfado de Agustín habría sido resultado del incumplimiento de uno de ellos.

La periodistaGema López informaba sobre el asunto y comenzaba explicando que "no quiere bajo ningún concepto que se grabe una imagen de Isabel". El motivo principal no sería otro más que impedir por todos los medios que haya espacio para las elucubraciones por parte de los medios de comunicación, respecto a la amistad que mantienen ambas mujeres.

Las máximas a evitar

La periodista ironizaba sobre las directrices de "San Agustín", como se refería Gema al hermano de la tonadillera, y enumeraba los "mandamientos".

El primero de todos sería el de no entrar al mismo tiempo y a solas en ningún hotel. De hecho, este primero estaría relacionado con el segundo que definiría la compañía de Mariló. La amiga de Isabel suele estar acompañada por su hermana, para dar a entender que de compartir habitación con alguien, sería con ella y no con la cantante.

"En el camerino"

El tercero, abordaría los desplazamientos. En cuanto a acudir a los conciertos, las dos no deberían dirigirse en el mismo vehículo al recinto: "Es más, Mariló sale del hotel antes y espera a Isabel Pantoja en el camerino".

El procedimiento exacto sería que tras las salida de Mariló del hotel, camino del lugar donde se celebrará el espectáculo, saldrían la escolta de la artista junto a su hermano, y acto seguido lo haría la artista.

Los últimos serán los primeros

"Mariló entrará la última al concierto, cuando las luces se apaguen"

El cuarto y último de los mandamientos, pero no por ello menos importante, sería una regla a cumplir una vez hubiera dado comienzo el concierto. Después, y sólo después, de sonar las primeras notas y apagarse la iluminación de las gradas y la pista, sería el momento en el que Mariló podría acceder al patio de butacas. Nunca antes de que toda la atención y los ojos del estadio estén dirigidos a 'La Tonadillera', podrá aparecer en escena Mariló y sentarse, eso sí, en la primera fila.

De esta manera la dificultad de que se pueda producir la captura de imágenes en la que aparezcan ambas al mismo tiempo es enorme.

Además, según la periodista "Mariló empieza a estar 'hasta aquí' de Agustín Pantoja" , expresaba al mismo tiempo que se echaba la mano a 'la coronilla'.