Un experto, sobre las colas para comprar Lotería de Navidad 2024: "Si creen que les va a tocar más fácilmente, lo entiendo un poco menos"

Este domingo, 22 de diciembre, por la mañana, los niños de San Ildefonso empezarán a desgañitarse con su retahíla de números en el Sorteo de la Lotería de Navidad desde el Teatro Real de Madrid. Las colas en las administraciones se intensifican estos días con comparadores pacientes para hacerse con un décimo. Un ejemplo, el que se forma alrededor de Doña Manolita, en la capital. Días antes del sorteo, se forma una cola de compradores que llega hasta la conocida Gran Vía con un tiempo de espera de tres horas de media. Hay gente, incluso, que coge sitio desde las cinco de la mañana esperando a la apertura, sobre las nueve, con sillas portátiles y mantas para protegerse del frío.

Un experto matemático nos explica por qué una cola kilométrica no garantiza el premio. "Lo entiendo como parte de una tradición; si es porque de verdad creen que les va a tocar más fácilmente, ya lo entiendo un poco menos", así lo considera el catedrático de matemáticas de la Universidad de Alcalá, David Orden, que reitera que existe un "componente emocional muy fuerte de ilusión, de tradición, con la familia; son muchas cosas que hacen que perdamos un poco esa racionalidad".

0,00001% de probabilidades para llevarse el Gordo

Pero, ¿cuál es la probabilidad? Las cifras estadísticas apuntan a que ganar el Gordo con un solo décimo es de uno entre 100.000 o, lo que es lo mismo, un 0,00001%. Para ilustrarlo, Orden nos trae un recipiente lleno de garbanzos, uno de ellos de color negro: "la idea es enseñar un poco lo difícil que esque nos toque algún premio o que nos toque el Gordo". "Tendríamos que poner 25 kilos de garbanzos y echar uno negro. Esa sería la probabilidad de que nos toque el Gordo", explica.

"¿Por qué en Doña Manolita? Siempre la compramos aquí"

En la cola que se forma alrededor de la administración madrileña de Doña Manolita se esconden muchas historias. Entre las que se encuentran las de María José de Toledo e Ino, que vive en Madrid. Aseguran estar animadas para afrontar las horas que tienen por delante. Les preguntamos si tienen en cuenta las probabilidades y la estadística a la hora de elegir dónde adquirir un décimo. Las dos coinciden en afirmar que todo atiende a una costumbre, a una tradición: "me encanta la lotería de Navidad y, ¿por qué en Doña Manolita? Siempre la compramos aquí".

Lo que tienen claro es que "la ilusión, desde luego, no tiene precio". Y no solo eso, también sacan provecho de las largas horas de espera para, incluso, socializar y conocer gente nueva.

Cada uno de esos 100.000 números tienen la misma probabilidad

¿Por qué hay números que tocan más veces que otros? El catedrático responde con una comparación: "igual que cuando uno tira una moneda, puede salir dos veces seguidas cara". En este caso "puede que salgan unos números más que otros, pero en realidad los bombos no tienen ninguna manera de acordarse de qué número ha salido la vez anterior". "Es una cosa completamente aleatoria y cada uno de esos 100.000 números tiene la misma probabilidad", asevera.

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