Eduardo, el padre de un policía local desaparecido en Valencia durante la DANA: "Me llamó y estaba muy nervioso"

La DANA que ha atravesado España ha dejado a su paso una tragedia de dimensiones aún por determinar. Según las últimas cifras aportadas por los servicios de emergencias, el número de víctimas mortales superan ya los 50. Mientras, los desaparecidos se cuentan por decenas. La DANA ha impactado con especial contundencia sobre la Comunidad Valenciana, Castilla- La Mancha y Andalucía.

Espejo Público ha hablado con varias personas que viven con la angustia de no localizar a sus familiares en las zonas más golpeadas por las fuertes lluvias y rachas de viento. Ese es el caso de Eduardo. Este hombre busca con desesperación a su hijo, un policía local que socorrió a una anciana que se había quedado atrapada por el agua y a la que se unieron otros 4 ancianos en la zona alta de una vivienda. Vive pendiente del teléfono. Por el momento no ha recibido ninguna noticia del teléfono habilitado para la emergencia 900 365 112 y desconoce el paradero.

Su hijo se encontraba en la localidad valenciana de Massanassa. Llevaba encima un teléfono de la Policía local que fue desde el que llamó a su padre, porque el suyo se le mojó. En esa llamada le dijo dónde y cómo se encontraba en ese momento.

"Me dijo que estaba mojado y los ancianos le dejaron ropa para poderse cambiar"

Cuando hablaron su hijo, también de nombre Eduardo, le dijo que estaba en la calle Blasco Ibáñez, justo enfrente de un Mercadona. Le comentó que a las 22.00 horas iba a salir a auxiliar a una familia y posteriormente le dijo que se había tenido que refugiar en la parte más alta de una vivienda. Le comentó además que estaba nervioso y no sabía qué hacer. Estaba mojado, los ancianos le dieron ropa de la casa y se pudo cambiar. Vio cómo a un coche lo arrastraba el agua y se estrellaba contra el escaparate del Mercadona. "Él estaba bastante tenso", relata.

"En el salón el agua les llegaba a la nariz y el chico casi mide 2 metros"

Eduardo le dijo a su padre que en el salón de la casa de los ancianos el agua les llegaba casi la nariz. "Es un chico que mide casi 2 metros, ahí había agua". Pide ayuda para que quien escuche su testimonio pueda aportar algún dato sobre su hijo. Según han comunicado las autoridades, ahora mismo una de las mayores dificultades de comunicación están siendo los fallos de la cobertura telefónica. La compañía telefónica trabaja para intentar reestablecer esas conexiones para dar tranquilidad a las familias que no pueden dar con sus familiares desaparecidos.

Eduardo vive en Córdoba, lejos de su hijo. "Había una mujer anciana que se estaba ahogando, fue a rescatarla y les sorprendió una corriente de agua terrible", resume este padre preocupado sobre la actuación policial que le contó su hijo.