La defensa del exmarido de Arantxa Sánchez-Vicario anuncia que van a "recurrir en todas las instancias"

Han pasado pocos días desde que se conocía la sentencia del caso de Arantxa Sánchez-Vicario. La justicia la condena a ella y a su exmarido por crear una trama para descapitalizarse y ocultar bienes para evitar así el pago de una deuda millonaria de seis millones de euros al Banco de Luxemburgo.

La jueza ha impuesto dos años de prisión a Arantxa por alzamiento de bienes y a Josep Santacana, exmarido de la extenista, tres años y tres meses. Con la sentencia en la mano ella no entraría en prisión al no tener antecedentes pero sí tendría que pagar una multa de 6,6 millones de euros por la deuda y los intereses de demora. Su exmarido sí tendría que ingresar en la cárcel al superar los dos años de

Prueba cuestionable

En "Espejo Público" hablamos con Juan Segarra, abogado de Josep Santacana. Segarra cree que es "un fallo inesperado" y que "no refleja lo que ocurrió en el juicio". La defensa de Santacana valora que es "un golpe duro" y reconoce que su representado ha recibido esta sentencia con perplejidad porque además todo ha sido muy precipitado. Santacana se encontraba en Miami cuando ha conocido la sentencia.

Según Segarra desde el inicio del juicio sabían que existía un acuerdo con Arantxa y que eso "iba en contra de nuestro cliente" Ha ocurrido, declara, lo que decíamos desde el inicio del juicio "el acuerdo entre las acusaciones y la acusada ha beneficiado a Arantxa y ha perjudicado a Santacana".

Desde el despacho de abogados que lleva el caso Segarra asegura que lo que hay que cuestionarse es cómo se construyeron unas pruebas que no existían, "sin la prueba constrtuída por las acusaciones de acuerdo con la acusada no existiría prueba" para considerar considerar el delito probado.

Segarra asegura que "es una prueba muy cuestionable" porque con ella los acusado consiguen un beneficio y por eso lo ponen en tela de juicio. La sentencia no es firme y anuncia que "vamos a recurrir" en todas las instancias. Arantxa Sánchez-Vicario aceptó los delitos que se le imputaban y pactó con la Fiscalía y con la acusación particular mientras que su exmarido, Josep Santacana siempre se declaró inocente.

La sentencia

La jueza del juzgado de Barcelona ha dictado sentencia y condena a Arantxa Sánchez Vicario a dos años de cárcel y a su exmarido Josep Santacana a tres años y tres meses por urdir una trama para evitar el pago de una deuda de más de seis millones de euros al Banco de Luxemburgo por el préstamo que pidió para pagar la multa de 5,2 millones por fraude a Hacienda. La juez considera que hay suficientes indicios de que los condenados descapitalizaron su patrimonio.