Inmigración

En el cementerio de El Hierro: así entierran a los inmigrantes que mueren de camino a nuestras costas

La dura realidad del drama de la inmigración lleva a los vecinos de El Hierro a enterrar en el cementerio del pueblo a los migrantes fallecidos para darles una despedida digna.

En medio de la batalla política por la Ley de Extranjería, este lunes se reúne en Madrid la Conferencia Sectorial para poner de nuevo sobre la mesa la distribución de los menores migrantes. A la espera de soluciones, los cayucos siguen llegando y algunas islas como El Hierro están al borde del colapso. Numerosas personas implicadas en trabajos directamente o indirectamente afectados por la crisis migratoria alzan la voz para denunciar la difícil situación que viven en las Islas Canarias, donde varios sectores están a punto del colapso. Raúl García se ha desplazado hasta allí para analizar la situación.

Vemos cómo la oleada de migrantes afecta también a los cementerios, donde entierran a aquellos que han fallecido al llegar al Puerto de la Restinga. ¿Pero qué ocurre con estas personas?

Raúl nos cuenta que hay cinco voluntarios en la isla que se ofrecen a despedir a los migrantes, entre ellos está Aída, una vecina del pueblo que acompaña a los fallecidos para que tengan un sepelio digno.

Una despedida digna

Solo en esta semana han fallecido 6 migrantes a los que se ha enterrado en este pequeño cementerio. Como desconocen sus nombres, utilizan un método de identificación para cada persona. Así, los vecinos de la isla aseguran que intentan despedirles "con la mayor dignidad y respeto posibles".

Enterrados en el cementerio de la isla también se encuentran los que han fallecido durante la travesía, pero tristemente muchos de estos migrantes fallecen en el mar. "Quedan en el mar muchas personas que han tirado por la borda, otras fallecen durante la embarcación. Si esto no nos remueve las entrañas y el corazón, estamos perdiendo mucho como sociedad", dice una de las vecinas.

Va más allá de la política

Más allá de una cuestión política, esto es un problema que tarda en encontrar solución. Los cayucos siguen llegando y la isla está desbordada. Como ha dicho en el programa Antonio M. Beaumont, presidente de ESDiario, hay que darse cuenta de que hablamos de personas, "con ojos y cara". Esto es un problema humano "y por consiguiente hay que ser muy prudentes". El tertuliano asegura también que cuando las cuestiones de inmigración entran en el debate público, estamos "deshumanizando el problema".