Incendio Valencia

La casualidad que salvó a Rafael del incendio de Valencia: "Dos minutos arriba o abajo y habría muerto"

Rafael Colomina llevaba 10 años viviendo, junto a su pareja y su hijo, en el ático, ubicado en la planta 14ª del edificio devorado por el incendio en el centro de Valencia. Afirma que en la tarde en la que se produjo el incendio se encontraba en la vivienda y cuenta las circunstancias en las que se produjo la salida de su familia del inmueble.

El valenciano afirma que en los primeros momentos del incendio se encontraba justo encima del lugar donde se inició el fuego y se percató de un olor a quemado que pensó procedente del interior de su vivienda, pero al asomarse apreció "un poquito de humo", pero que cuando tan sólo un minuto después observó "unas partículas subir, y lo que antes era humo, era como si estuvieran tirando con un lanzallamas".

"Coge al niño y vámonos"

La tarde de ese fatídico jueves Rafael no cumplió escrupulosamente con su rutina, y como el mismo relata: : "Dio la casualidad que ese día no estaba en el gimnasio, sino que estaba en la terraza". Además la rápida reacción que tuvo Rafael salvó probablemente las vidas del niño, su pareja y la suya propia. Al ver que una gran cantidad de humo alcanzaba su terraza le dijo a su pareja: "Coge al niño y vámonos que hay un incendio".

"Actué por instinto"

Es consciente que los protocolos indican que lo más aconsejable en esos casos no es precisamente lo que hicieron, pero afirma que en aquel momento actuó con rapidez movido por su instinto: "Cogí el ordenador, porque lo tenía a mano, al niño, el carrito, los perros y bajé".

Además reconoce que fue consciente de cometer una negligencia al utilizar el ascensor para evacuar lo antes posible el edificio. Admite incluso que en el descenso se iba fijando en el piso por el que se movía el ascensor sintiendo alivio por cada piso que descendía.

Rafael cuenta cómo, pocos minutos después, en el momento en que salieron del edificio vieron que "la lengua de fuego había subido 7 plantas" y alcanzaba ya el piso decimocuarto, donde estaba su casa, por lo que afirma: "Dos minutos arriba, dos minutos abajo, habría muerto".

El futuro del edificio

Los expertos trabajan ahora en esclarecer el estado del inmueble, principalmente de su estructura. Este proceso de evaluación e intento de recuperación de la estructura, según los técnicos, podría alargarse hasta principios del verano.

"Las estructuras, a mi los bomberos me han dicho que la estructura no parece que esté muy tocada"

Rafael Colomina

Aun así Rafael reconoce que, sin estar completamente seguro, si estaría convencido de que el edificio podrá rehabilitarse y confirma que ese es su objetivo. Y apoya su optimismo en que "una de las habitaciones la sacaron entera, perchas de plástico y todo", mencionando también que "tanta temperatura no ha cogido arriba porque si no, se hubieran deshecho las perchas".

Finalmente Rafael asegura que su intención es volver al que ha sido su hogar durante los últimos 10 años y "hacerla exactamente igual que estaba, hasta la cubertería".