Carmen Morales se sincera en Espejo Público: "Me arrepiento de la guerra familiar que vivimos con mi padre"

Carmen Morales ha regresado al teatro. Es una de las protagonistas de la obra 'El novio de España' que se interpreta el mes de julio en el teatro La Latina de Madrid y que en el mes de agosto viajará a Valencia. Una divertida historia ambientada en los años 50 donde recrea un famoso rodaje de Carmen Sevilla.

Sus padres Rocío Dúrcal y Antonio Morales Junior formaban una familia feliz de postal junto a sus 3 hijos. Tras la muerte de Rocío crecen los conflictos familiares de los hijos con su padre, y también enfrentamientos entre los hermanos. Durante muchos años fueron protagonistas de los medios de comunicación sin quererlo. Finalmente consiguieron reconciliarse con su padre y ahora, ya con los dos en el cielo, Carmen se siente en paz.

"Durante muchos años pausé mis sueños"

En su vuelta al teatro tiene mucho que ver el guionista Juan Carlos Rubio. En un primer momento se puso en contacto con ella para hacer la función 'Querida Ágatha' y hace un mes y medio le contó que se iba Marta Valverde, que es la actriz que antes hacía La Marquesa en 'El novio de España', y quería contar con ella. Se lo propuso, dudó unos segundos porque era un musical, pero finalmente se lanzó al proyecto.

Su hijo tiene ahora 27 años. Reconoce que durante años pausó sus sueños porque quería vivir esos momentos de vida privada con su familia como madre y esposa y disfrutarlos. Ahora se dio cuenta de que nadie le necesitaba ya y ha decidido emprender su vocación nuevamente.

"Creo que a veces es bueno arrepentirse de las cosas en la vida"

Recuerda una época convulsa de la prensa cuando les seguían por los distintos conflictos familiares que vivieron. "Creo que es bonito o bueno arrepentirse de algunas cosas en la vida. Viví momentos muy duros y tomamos una decisión que yo creo que fue errónea pero papá se fue tranquilo. Sí tuvimos momentos muy bonitos después y sí vino a mi boda", recuerda.

Reconoce que hace dos años cuando se separó sintió "un vacío tremendo". "Hablaba con mis padres continuamente porque echaba de menos poder hablar de verdad. Como no podía hacerlo tenía que hacer el vacío y tirar para adelante", señala. Cree que el mundo audiovisual castiga mucho en el sentido físico y especialmente en el cine, donde es muy difícil entrar.

Su hermana Shaila ha comprado la casa familiar para instalarse con su familia. "Esa casa ya es música otra vez. Fue mudarse y ya empezaron a grabar cosas otra vez", apunta.