Málaga

Así resolvió la Policía el secuestro de un magnate de las criptomonedas en tan solo 5 horas

La víctima pudo hacer una foto desde su teléfono móvil de la casa en la que permanecía retenido en Benalmádena (Málaga) y mandársela a un conocido suyo. A partir de este dato la Policía tardó 5 horas en resolver el caso.

La Policía Nacional ha resuelto un complicado secuestro en Benalmádena (Málaga) en tan solo 5 horas. La víctima era un gestor de criptomonedas de origen húngaro. Los secuestradores pedían por él 1 millón de euros como rescate. La víctima ha sido localizada en una lujosa vivienda a primera línea de playa.

El secuestrado vivió una auténtica pesadilla en una vivienda de la urbanización Torrequebrada. Fue un error de los secuestradores lo que permitió a este hombre enviar una imagen desde el interior de la habitación donde se encontraba para ser localizado. Ese despiste fue clave para que la Policía Nacional ubicara la casa y horas después se desplegara con un medio centenar de efectivos, incluida la figura del mediador.

Los agentes entraron en la casa y, tras asistir a la víctima de las magulladuras que le habían provocado sus captores, encontraron armas de fuego además de una habitación cubierta por plásticos y varias armas.

Una operación policial a plena luz del día

La Policía realizó la entrada a la casa a plena luz del día en torno a las 18.00 horas. Tenían la certeza de que en la mansión había secuestrado un gestor de criptomonedas de origen húngaro. Horas antes los secuestradores mandaron una foto de la víctima a un amigo. El rehén aparecía apuntado con un arma y la cabeza sobre una almohada.

Todo dispuesto para torturar al rehén: Una habitación con plásticos y varias armas

La Policía sorprendió en la vivienda a 3 individuos. El hombre estaba recluido en una habitación recubierta con plásticos donde había sierras, unas tijeras de podar y armas, un escenario preparado para la tortura. Los investigadores ubicaron la villa a través de una foto que recibió un conocido suyo en Hungría.

Los detenidos son dos ciudadanos griegos y un albanés que en el momento de la detención tenían dos armas de fuego con munición, una de ellas con silenciador.