Así intentó matar a otra mujer el descuartizador confeso de Marta Calvo: "Me introdujo rocas de cocaína por vía anal y vaginal"

La madre de Marta Calvo, Marisol Burón, ha conseguido sentar en el banquillo de los acusados a J. I. Palma, de 40, años, por el asesinato de su hija y el de otras 2 mujeres así como el abuso sexual de otras 8. Fue la propia Marisol la que habló con el asesino de su hija sin saberlo cuando esta desapareció. Marta le había mandado a su madre la ubicación en la que se encontraba antes de desaparecer. Una vivienda de la localidad valenciana de Silla. El acusado le abrió la puerta y le dijo que no sabía nada de su hija, pero mentía.

Semanas después terminó confesando que había descuartizado el cuerpo sin vida de la joven y que lo había arrojado a distintos contenedores de la zona. Los efectivos de búsqueda intentaron localizar esos restos sin éxito. "Si mi hija no llega a mandar la ubicación este señor seguiría por ahí matando gente", decía Marisol en la puerta del juzgado.

"La madre de Marta habló sin saberlo con el asesino de su hija y este le dijo que no la conocía"

En la sesión de este martes ha declarado una mujer con la que el acusado mantuvo relaciones sexuales y que estuvo a punto de perder la vida. "Si hubiera llegado 5 minutos más tarde hubiera muerto", asegura la joven que le dijeron en el servicio de urgencias al que acudió. El acusado realizó con ella la llamada 'fiesta blanca'. Introdujo cocaína pura en sus partes íntimas por vía anal y vaginal.

Ha relatado que como ella no estaba acostumbrada a consumir droga él la intentó relajar haciéndole un masaje en el que aprovechó para introducirle las rocas de cocaína. La mujer comenzó a sentirse mal, se duchó y se dio cuenta de que tenía algo en sus cavidades. Consiguió sacarse unas 6 del tamaño de un garbanzo, tal y como ha asegurado.

Al ver que su vida corría peligro cogió un cuchillo, por si el acusado le impedía el paso, y salió del lugar para dirigirse a urgencias. La defensa del detenido asegura que este tiene un problema de drogadicción y que en ningún momento pretendía matarlas.

Cuenta Nacho Abad que en sus encuentros sexuales el descuartizador confeso de Marta Calvo solía introducirles droga en las partes íntimas porque era su fantasía sexual. Dos mujeres fallecieron antes que Marta Calvo después de haber mantenido relaciones sexuales con él. Cuando se encuentran los cuerpos se halla una presencia de cocaína de más del 91% de pureza y en otro de los casos del 83% de pureza. Hay otros testimonios de mujeres a las que ha intentado introducir droga y se han negado. Cuentan que cuando se resistieron a esas prácticas él se puso violento.