Vivienda

El alegato del sindicato de inquilinas: "¿Cómo es posible que acabe de cobrar y al día siguiente me quede la mitad del sueldo porque se lo ha llevado un rentista?

El precio de la vivienda está provocando movilizaciones en toda España de quienes consideran que estamos inmersos en un mercado de precios abusivos. Un promotor inmobiliario y la portavoz del sindicato de inquilinas debaten sobre esta cuestión en Espejo Público.

Espejo Público reúne en un cara a cara a Manel Rodríguez, ceo de la promotora inmobiliaria Grupo Salas de viviendas sociales, y a Carmen Alcarazo, portavoz del sindicato de inquilinas. Alcarazo apunta que este Gobierno "no ha hecho nada en materia de vivienda". "La ministra se dedica a pedir la solidaridad de los propietarios y ella misma es rentista", afirma. Interpreta que después de las manifestaciones masivas, que se convoque una reunión convocando a todos los actores quiere mandar un mensaje pacificador diciendo que lo tienen todo controlado.

Piensa que se quiere lanzar un mensaje muy concreto de que los intereses de inquilinos y patronal se pueden conciliar, "de que hay un punto medio donde todo el mundo puede estar contento, pero esto es mentira". Considera que el Gobierno tiene que escoger: si va a seguir legislando para los rentistas o va a legislar para los inquilinos. "La situación está al límite, ¿Cómo puede ser que yo acabe de cobrar y al día siguiente solo me quede la mitad del sueldo porque eso se lo ha llevado un rentista?", se pregunta.

"El problema es que hay menos viviendas que familias"

Para Manel Rodríguez es obvio que "tenemos un grave problema con el tema de la vivienda". Agradece que el Gobierno haya incorporado a esa reunión a entidades que afrontan el problema desde el tercer sector y atendiendo siempre a entender el problema. "El problema es que hay menos viviendas que familias", establece. Ve una necesidad clara que es la de incrementar la producción de vivienda.

El Banco de España reconoce que se necesitan entre 600.000 y 700.000 viviendas en España. Rodríguez pide un pacto de Estado transversal a largo plazo para afrontar ese problema en el que colaboren todas las administraciones y toda la estructura productiva.

La portavoz del sindicato de inquilinas insiste en que estamos viendo cómo la sociedad se está dividiendo y cada vez hay más inquilinos y menos caseros que acumulan más vivienda. "Los ingresos de los inquilinos son la mitad de los de los caseros sin tener en cuenta lo que ellos reciben de la renta. Es una transferencia de rentas de la población más pobre a la más rica".