Entrevista

El Albert Rivera más emocional se sincera en 'Más Espejo': "Me dejaron hacer pero si me caía me tenía que levantar, me decían: 'Espabila'"

Después de más de 4 años sin conceder una entrevista, Albert Rivera, reaparecía públicamente en el plató de Espejo Público el día del estreno de la nueva temporada del programa. Rivera analizaba la situación política actual y además mostraba su cara más personal.

El que fuera uno de los políticos llamados a traer una regeneración a la clase política en los últimos tiempos respondía a las preguntas de la periodista Susanna Griso, sobre una gran cantidad de asuntos de actualidad y personales.

En una extensa primera parte de la entrevista, Albert Rivera abordaba todos los temas que marcan la actualidad política nacional e internacional. El expolítico compartía su opinión de la situación actual y se pronunciaba sobre temas como la financiación singular de Cataluña, Venezuela o la crisis migratoria entre otros.

Eso sí, después de hacerlo, Albert Rivera se abría y de respondía de forma distendida a preguntas de ámbito personal, llegando en algún momento a emocionarse.

El Rivera más sensible

Albert no dejaba pasar más tiempo para subrayar que la política le habría 'robado' una gran cantidad de tiempo con los suyos, especialmente de estar junto a sus hijas: "Ahora tengo tiempo de estar con mi hija de 4 años, y a la mayor la veo más".

El que fuera líder de Ciudadanos deja claro que la paternidad es "lo más importante" que le ha ocurrido en toda su vida así como que es una experiencia totalmente transformadora: "El día que nacen tus hijas pasan a ser el día más importante de tu vida, para siempre. Se abre una dimensión nueva que nunca se cierra".

"Puedo incluso apagar el móvil", aseguraba el exdiputado, que agradecía que eso le permite disponer de mayor libertad para cultivar la relación padre, con sus hijas.

Una figura referente

"Tengo la suerte de haber tenido un gran padre [...]"

Albert Rivera

El también abogado, reconocía la que ha sido una persona fundamental en su vida. Su padre. Recientemente se cumplía el primer aniversario del fallecimiento de su padre. Albert hablaba deshaciéndose en elogios hacia su progenitor y publicaba un emotivo vídeo en redes sociales en el que le dedicaba una bonita y emotiva carta. En ella enumeraba la cantidad de cosas cotidianas que añora de los momentos que compartieron y cosas de lo más normal que hacían juntos.

"Tengo la suerte de haber tenido un gran padre, de tener su legado y llevarlo conmigo, y de que se fuera en paz", afirmaba Albert Rivera, que se mostraba agradecido al mismo tiempo que admitía echar de menos enormemente a su padre, con quien por último afirmaba haber tenido "una relación estupenda", pese a estar "sin hablar durante un mes" debido a las responsabilidades de Albert, tras lo cual no habría "ni un reproche".

Agradecido de su educación

Albert Rivera mencionaba 2 principiosesenciales de su educación que considera: Libertad y responsabilidad. Términos que relacionaba y explicaba de forma sencilla con la siguiente afirmación: "Me dejaron hacer pero si me caía me tenía que levantar, me decían: 'Espabila'".

Manifestaba el expolítico que desea algo similar para sus hijas, tratando de actuar en consecuencia y de la misma manera que lo hicieron sus padres: "Que tengan esa libertad. Que tengan una visión abierta, de mundo. Que tengan valores. Que hagan y que sean lo que quieran. Que nadie les imponga nada".

También se acordaba Albert de su madre, que habría sufrido mucho toda la exposición mediática de su hijo, con todo lo que eso implica.

Sensación agridulce

A parte de los ataques de sus contrincantes políticos, Albert Rivera tuvo que enfrentarse a los focos por su vida privada. Las verdades y mentiras que se decían, hacían mella en los sentimientos de una madre. Como a la mayoría, el daño a sus hijos resulta peor que el sufrido en propias carnes.

En ocasiones recibía ataques "a mala fe", e incluso recibir amenazas de muerte, como aseguraba, llevaron a que su madre llegara a decirle que tomara medidas: "Si no lo haces por ti, al menos hazlo por nosotros", casi criticando el afán de aguante de Alberto: "Siempre fui de encajar y encajar".

Relataba cómo fue el día que abandonó la política para su madre, quien experimentó sentimientos encontrados. Por un lado, "qué alivio", pero por otro, también sentía que perdía algo, por el apoyo que le dieron "hasta el último minuto".

Un político atípico

"Respeto a quien quiera contar su vida y pido respeto para los que no la queremos contar"Albert Rivera

También ha copado titulares en el mundo del periodismo del corazón, cosa que sigue viendo como algo nada fácil de digerir, ya que el mismo se define como alguien "discreto".

Declara que actualmente vive una situación mucho más tranquila que hace unos años. Aun así todavía se enfrenta a situaciones incómodas: "Encontrarte cámaras escondidas 5 años después de dejar la política, no es cómodo. No le apetece a nadie".