Entrevista a Luis Rojas Marcos, ex director de los hospitales públicos de Nueva York
"Aconsejamos utilizar las tecnologías para conectarnos con nuestros seres queridos, es fundamental para superar estos momentos de miedo"
El psiquiatra Luis Rojas Marcos ha sido el responsable de los hospitales públicos de Nueva York y de los servicios municipales de salud mental. Desde allí está siendo testigo de la dramática lucha contra el COVID-19. Asegura que el coronavirus mata directamente pero también a través de la depresión causada por la ansiedad y el pánico.
El psiquiatra Luis Rojas Marcos ha sido el responsable de los hospitales públicos de Nueva York y de los servicios municipales de salud mental. En Espejo Público se ha referido a la lucha contra la pandemia en Nueva York. Ha dicho que a pesar de que nos aconsejan el distanciamiento social, en realidad se trata de un distanciamiento físico y gracias a Internet afortunadamente podemos hablar con nuestros familiares y amigos. Rojas Marcos señala: "Es como estar en una cárcel y no estamos acostumbrados a eso. Aconsejamos utilizar las tecnologías para conectarnos con nuestros seres queridos, es fundamental para superar estos momentos de miedo".
Asegura que algunas personas a causa del confinamiento están padeciendo mucha ansiedad, pánico y miedo, "sobre todo cuando no hay respuestas claras de hasta cuando va a durar esto". Explica que también hay muertes por motivos de depresión y por el pánico de la situación que vivimos a causa de la pandemia de coronavirus, como por ejemplo cuando alguien pierde el trabajo y no puede alimentar a su familia.
"Aquí aproximadamente 30 millones de estadounidenses no tienen seguro médico y por lo tanto si necesitan cuidados tienen que utilizar los ahorros, en algunos casos, de toda una vida y esto genera más ansiedad y temor", manifiesta. El doctor Rojas Marcos señala que poder salir a dar un paseo puede ayudar en muchos casos porque el confinamiento en casa continuamente "crea problemas de convivencia y falta de libertad".
Por último, ha querido comentar la situación que están viviendo en Nueva York: "Como no hay prohibición para viajar en coche las personas que tienen una segunda residencia pueden ir y eso crea ansiedad en los habitantes de fuera de Nueva York, porque efectivamente las personas que viajan a las afueras a menudo llevan con ellos el virus y esto ha causado que aumente el número de contagios fuera de la ciudad".