Fuentes del caso

El abuelo que mató a sus dos nietos en Huétor Tájar, Granada, conducía sin carnet

El drama de la familia comenzó con un accidente de tráfico que causó la muerte de la madre y la abuela de los niños. El conductor era el abuelo, que se habría desvanecido o dormido al volante, perdiendo el control del vehículo, que impactó contra un muro de hormigón, por lo que, según informaban fuentes de la investigación a Espejo Público.

En el municipio de Huétor Tájar, en Granada, sus habitantes parecen mostrar unanimidad en cuanto a la familia que ha protagonizado unos sucesos trágicos, a la que muchos de sus vecinos definían como humilde y trabajadora, buena y normal.

El pasado 19 de marzo la vida de todos los miembros de una familia dio un vuelco para siempre, pero no sería el último episodio de una situación dramática que en la madrugada del domingo al lunes dejaba como víctimas de homicidio a dos hermanos de 10 y 12 años.

A finales de marzo, los niños, su madre y sus abuelos, iban en un vehículo que conducía el abuelo, Pepe 'el de la arena', como era conocido en el municipio debido a su profesión de arenero. Se desconoce al cien por cien la causa que originó la pérdida de control del coche, aunque se baraja un desmayo o una cabezada. Como aseguraban las autoridades a la periodista de Antena 3, Toñi Portillo, y afirmaban también algunos vecinos, después del accidente las autoridades habrían retirado el carnet de conducir a Pepe, por los hechos y al parecer porque sufría apnea del sueño, aunque éste seguía cogiendo el coche y quería seguir llevando a sus nietos en él.

"había dicho en varias ocasiones que se iba a quitar la vida, que se iba a pegar un tiro"

Vecino de Huétor Tájar

Desde el accidente, el dolor y la culpa se apoderaron del abuelo, que estaba recibiendo tratamiento psicológico. Además el padre de los pequeños, quienes aún sufrían las secuelas físicas del accidente de tráfico, evitaba que los niños pasaran tiempo con su abuelo, a quién además el progenitor habría comunicado su intención de abandonar el pueblo junto a los niños.

Todos estos hechos habrían motivado la discusión entre el padre de los menores y el abuelo, la tarde del domingo, que desencadenó los fatales acontecimientos posteriores, acabando el hombre de 72 años con la vida de sus nietos de 10 y 12, y posteriormente se suicidaba.

"Era muy amable. Siempre se llevaban bien. Muy amable y muy buena persona con los vecinos, con la familia, con todo el mundo"

Encarni, vecina de Huétor Tájar

En el pueblo granadino sus habitantes continúan consternados por todos los sucesos que en apenas 2 meses han destrozado a la familia. Aun así, muchos de los vecinos consultados insisten en que Pepe "era una bella persona siempre", hasta lo ocurrido en la madrugada del lunes, matizaba Encarni, una vecina.

Como relataba Toñi Portillo, otra vecina se acercaba la tarde del lunes a ella para comunicarle su descontento: "Me está molestando terriblemente que estéis hablando de ese abuelo como el Asesino. Deberíais hablar de él como un enfermo".

"Asesino no es, esa palabra es muy fuerte"

Encarni

Encarni por su parte se manifestaba en el mismo sentido: "La palabra asesino es muy fuerte. Sí, ha matado a sus nietos, pero este hombre no se puede calificar así. Yo, personalmente, como asesino no".