Una de las 3 hermanas asesinadas en Morata de Tajuña fue agredida con un martillo por un huésped pakistaní al que pidió dinero

Tres hermanos de entre 70 y 80 años han sido hallados muertos con signos de violencia en su domicilio de Morata de Tajuña (Madrid). Estas hermanas se habían enamorado de unos supuestos militares estadounidenses a los que ellas les estaban prestando muchísimo dinero. Estos hombres que decían ser militares les decían que se encontraban en una operación viviendo en Afganistán. Durante años estuvieron pidiendo dinero a estas mujeres apelando al enamoramiento que tenían ambas.

Una de las mujeres inició una relación a distancia con uno de los llamados militares y la otra hermana la inició posteriormente con el asistente del militar. Vecinos y familiares cuentan que habían roto sus relaciones con mucha gente que les había advertido de que esta relación era un fraude. Habían pedido dinero a algunos vecinos. Una mujer cuenta ante los micrófonos de Espejo Público que a ella le pidió 15.000 euros y le prometió devolverle 30.000 semanas después.

Los 3 cuerpos aparecieron con signos de violencia, apilados y parcialmente quemados

El ataque tuvo lugar en el domicilio en el que vivían los 3 hermanos. Fueron los vecinos quienes dieron la voz de alarma después de semanas sin verle por el pueblo. Tal y como ha contado la periodista Ana Regalado los 3 cuerpos aparecieron con signos de violencia, apilados y parcialmente quemados.

La principal línea de investigación de los investigadores es que tenían deudas pendientes con prestamistas y esos prestamistas estarían detrás de esas muertes de carácter violento. El pasado verano, asegura Ana Regalado, que algunos vecinos señalan que un hombre de origen pakistaní vivió con ellos en su domicilio. Los hermanos le alquilaron una habitación y también a él le pidieron dinero. Según las mismas fuentes hubo un suceso con este hombre, les agredió a una de las hermanas llamada Amelia con un martillo. Se llegó a celebrar incluso un juicio y la Guardia Civil investiga esta vía y otras posibilidades.

Las hermanas habían vendido varias propiedades y mensualmente pasaban sus pensiones a estas personas. Según su entorno las hermanas pedían a su entorno cantidades importantes de dinero como 10.000 o 18.000. Al individuo que vivía con ellas le pidieron 60.000 euros.