NÚMERO DE SERIE
Desde el primer episodio '30 Rock' ha mantenido una estructura narrativa tan sencilla como eficaz, fiel y coherente con sus personajes. Liz Lemon (Tina Fey) y Jack Donaghy (Alec Baldwin) son dos de los protagonistas cómicos mejor construidos para la pequeña pantalla. Antagonistas y protagonistas, amigos y a la vez polos opuestos, han tenido cientos de escenas, han compartido plano en numerosas ocasiones y nunca han cansado al espectador. Y a eso se le llama maestría en el guión.
Además de los dos grandes protagonistas, hay tres enormes secundarios: Jena Maroney (interpretada por la genial Jane Krakowski), Tracy Jordan (Tracy Morgan) y Kenneth Parcell (Jack McBrayer). La serie no hubiese sido la misma sin el ego enfermizo de Jena, las frases surrealistas de Tracy o la sumisión de Kenneth con las dos estrellas de TGS, el programa ficticio de NBC.
Aunque la serie se desarrolla en un programa de televisión no es una serie sobre la televisión, es una comedia inteligente, repleta de giros, de referencias a la actualidad y de saber reírse de uno mismo. Una constante que han mantenido, con muchísima calidad, a lo largo de los años. Una fórmula que, evidentemente, no es para grandes audiencias pero sí para un público exigente y exquisito.
Mención especial merecen los innumerables cameos de la serie, desde políticos como Condoleezza Rice, hasta actores tan conocidos como Julianne Moore, Jennifer Anniston, Salma Hayek, Edie Falco, Steve Buscemi, Jon Hamm o Kelsey Grammer, entre una larga lista de actores invitados. Se nota que las simpatías hacia Tina Fey, creadora, guionista y protagonista de la serie, son firmes y frecuentes.
Ya no volveremos a ver a Liz entrar al despacho de Jack con alguna de sus dudas emocionales, tampoco escucharemos uno de los discursos motivadores y neoconservadores de Jack, ni oiremos cantar a Jenna a capella, ni veremos el apartamento de Kenneth decorado con merchandising de NBC, ni a Tracy huyendo del plató de TGS. Tampoco habrá más rupturas de la cuarta pared. Todo eso lo vimos por última vez en el episodio final, que huyó de la grandilocuencia y fue fiel a sus principios, a la esencia de '30 Rock'.
'30 Rock' es alta comedia, es artesanía de guión, es televisión entendida como entretenimiento inteligente, no como un alineador de conciencias. Desde luego ha sido una de las mejores series de la última década y aunque será recordada por unos pocos, ocupará un lugar privilegiado en la memoria catódica de sus fieles y concienzudos fans.