MOMENTOS DE CAMBIO
La plataforma de WarnerMedia ha pasado de querer competir cara a cara con Netflix y Disney+ a vivir un turbulento proceso de fusión con Discovery que ha dejado por el camino muchas cancelaciones y que todavía no ha llegado a su fin. ¿Qué está pasando con HBO Max?
En abril comenzó un terremoto cuyas sacudidas todavía se están notando en las tierras del streaming y que la semana pasada se llevaron por delante a varias series.
El lío está montado en los páramos de HBO Max y entre las damnificadas se cuentan ficciones como 'Westworld', 'Genera+ion', 'Final Space', 'The Nevers', 'Raised by wolves' o 'Minx', entre otras. Pero, ¿de dónde vienen todos estos cambios? Y, sobre todo, ¿hacia qué escenario se está dirigiendo la plataforma norteamericana?
A medida que las guerras del streaming avanzan, las diferentes macrocompañías que dominan el sector en EEUU están reestructurándose y cambiando de posición. Si Netflix fue, en cierto modo, la punta de lanza de esta nueva forma de consumo audiovisual, después se sumaron gigantes que vienen de otros sectores como Amazon (de la venta online) o Apple (de tecnología), pero también compañías de producción y estudios como Warner. Bros o Paramount. Salvo Sony que ha preferido no montar su propia plataforma, prácticamente todos los grandes estudios se han embarcado en el negocio de tener su propio servicio en el que volcar sus contenidos y cobrar por ellos, aunque con el tiempo los resultados han sido dispares y, quizás, ahora se esté viendo que no era un negocio tan rentable o que, al menos, no había sitio para todos.
Una fusión que cambió la estrategia
Mientras que algunos como Lionsgate+ están retirándose del juego, otros como HBO Max empiezan a repensar sus estrategias. Y, en este caso, la raíz del asunto es una gran fusión que comenzó a fraguarse, como decíamos al principio, en abril de 2022. Las dos empresas que se unían eran WarnerMedia, propiedad del conglomerado de comunicaciones AT&T y dueña de HBO Max, y el grupo Discovery, que había lanzado hace no mucho su propio servicio Discovery+. Si bien al principio se pensó que la compañía resultante, que se denominó Warner Bros. Discovery, seguiría los pasos de Disney y ofrecería sus plataformas en pack (esta lo hace con Disney+, Hulu y la deportiva ESPN+), su nuevo CEO, David Zaslav, quiere ir más allá: ha empezado un proceso de recortes, eliminación de duplicidad y diversificación de negocio que todavía no está del todo claro.
Para empezar, Zaslav está deshaciendo el enfoque que tenía hasta ahora HBO Max. La idea del equipo anterior era que esta plataforma partiese de la diferenciación y garantía de calidad que suponía la marca HBO, tradicionalmente enfocada a una minoría urbana y de alto poder adquisitivo que pagaba su suscripción, pero expandiendo su target a un público más amplio, de ahí que en el "Max" cupiesen propuestas menos elitistas como 'The Flight Attendant' o el remake de 'Gossip Girl', superhéroes de DC Cómics, contenido infantil de Cartoon Network y mucho más. En definitiva, HBO Max buscaba ser el competidor más directo y potente de Netflix, jugando en la misma liga pero aprovechando un largo reguero de marcas y franquicias anteriores.
Recortar y ahorrar
Pero intentar ser Netflix no es barato. Requiere producir muchos contenidos para muchos públicos diferentes; no vale tener una o dos series muy buenas al trimestre o al mes, sino que hace falta producir contenido infantil, realities, programas, humor... Y ahora Warner Bros. Discovery piensa que esa estrategia es, sencillamente, un despilfarro. Zaslav advirtió en su entrada que HBO había perdido 3.000 millones de dólares en 2021 (habiendo realizado una inversión de 7.000 millones en producción), especialmente con la estrategia de llevar las películas de Warner directamente a HBO Max sin pasar por cines, y ese ha sido su caballo de batalla desde entonces: ahorrar.
En julio se cortó la producción de originales en Europa, salvo Francia y España, y en agosto comenzó la escabechina de HBO Max, que afectó, sobre todo, a series animadas y reality shows. Lo llamativo fue que, además de no encargar nuevas temporadas de muchos de sus productos, directamente los sacaron de catálogo para ahorrar dinero a través de exenciones fiscales y evitando renovar derechos de autor y royalties.
Muchas series pasaron de formar parte de la librería de HBO Max a quedar en el limbo. Fue el caso de 'Genera+ion', 'Vinyl', el programa 'The Not-Too-Late Show with Elmo' de la franquicia 'Barrio Sésamo' o el reality de diseñadores de muebles de Ellen DeGeneres. Ahora, en diciembre, el hacha ha vuelto a afilarse y se han cancelado 'Made for Love', 'Love life', la serie de Joss Whedon 'The Nevers' o 'Minx' (esta, curiosamente, cuando faltaba solo una semana para concluir el rodaje de su segunda temporada, que ahora no se sabe dónde se podrá ver), así como los realities 'Legendary' y 'FBoy Island', entre otros.
Si bien la primera ronda de cancelaciones fue sorprendente por el elevado número de producciones que caían, no lo era tanto por los títulos, pues no se contaban entre ellas demasiados éxitos. Pero el caso de 'Westworld' sí llamó mucho la atención. Aunque no era una serie de masas, la ficción del matrimonio Nolan-Joy ha sido uno de los estandartes de HBO Max en los últimos años y una de las propuestas de ciencia ficción más aclamadas. Era justo lo que la HBO de hace unos años buscaba: una serie muy potente que nadie más estuviese haciendo, independientemente de si sus números la convertían en un hit mundial (a lo 'Juego de tronos'). Y no solo es que HBO Max haya decidido no concederle a 'Westworld' una última temporada, sino que la van a sacar de catálogo próximamente, sin que se sepa aún cuál es su destino.
Entonces, ¿cuál es el nuevo modelo?
Desde HBO Max se han limitado a decir que buscan "oportunidades para expandir aún más el alcance de nuestros programas, que incluyen, entre otros, licenciarlos a plataformas FAST de terceros". Esto nos da un par de pistas, aunque no definitivas. Por un lado, Warner Bros. Discovery no está interesada en el negocio de la exclusividad de sus contenidos (justo lo contrario que aquella estrategia de tener sus películas directamente en HBO Max) sino que se abre a vender los derechos a otros.
Tanto, que está negociando con Amazon para que se queden la parte animada de DC. Por otro lado, tienen el ojo puesto en las plataformas FAST (free ad-supported TV, es decir, plataformas gratuitas cuyo modelo son los anuncios, como Pluto TV, Tubi o Freevee, muy en auge en EEUU). De hecho, el pasado noviembre, HBO Max lanzó su versión con anuncios en Estados Unidos (aquí aún no ha llegado), por cinco dólares menos que la versión normal.
A todo esto hay que añadir que Warner Bros. Discovery todavía tiene que mostrar sus cartas respecto a la fusión de HBO Max con Discovery+. La segunda es una plataforma mucho menos prestigiosa, con mucho contenido centrado en deporte, estilo de vida, gastronomía o documentales (bebe de canales de cable como HGTV, Food Network, TLC, OWN, Animal Planet, Discovery Channel...). Algunos rumores apuntan a que podrían quedarse simplemente con "Max" como nombre y aglutinar todo, otros que van a segmentar y separar más sus contenidos y los hay que vaticinan que la suscripción dará paso a la publicidad. En 2023 veremos cómo queda la cosa.