ESTRENO EN ATRESPLAYER
Lola Rodríguez vuelve a encarnar a Valeria Vegas en esta ficción que reivindica la figura de las protagonistas del documental Vestida de azul. Se estrena este domingo en atresplayer.
Veneno supuso un punto y aparte en la carrera de Javier Ambrossi y Javier Calvo como creadores. Su serie no solo fue un éxito de crítica y público para atresplayer, sino que cruzó fronteras y logró reconocimientos al exportarse a Latinoamérica y Estados Unidos: desde el cineasta John Cameron Mitchell a la mismísima Madonna se enamoraron de la poderosa historia de Cristina Ortiz y del resto de personajes que componían la serie. Ahora, aquel universo donde el drama y la comedia se entrelazaban se amplía a través de una secuela, Vestidas de azul, que expande el abanico de vivencias trans sobre las que poner el foco. La serie, producida por Atresmedia TV en colaboración con Suma Content, se estrena este domingo 17 de diciembre en la plataforma atresplayer.
El personaje de Valeria Vegas, encarnada por Lola Rodríguez, vuelve a ser el hilo conductor del relato como ya lo era en Veneno. Después de lo acontecido en la serie anterior, Valeria se encuentra trabajando como periodista realizando diversas colaboraciones, pero de algún modo todavía no ha encontrado su camino del todo. Pero el regreso a Valencia por la muerte de Rocío (un guiño precioso a la fallecida Laura Frenchkiss) le ayuda a encontrar el camino: se propone hacer otro libro, esta vez sobre las protagonistas de Vestida de azul, el documental de Antonio Giménez-Rico de 1983. Al igual que con Cristina, Vegas siente la necesidad de poner en valor las vidas, alegrías y tragedias de este grupo de mujeres trans que abrieron una puerta a la visibilidad.
Loren (Rossa Ceballos), Tamara (Chloe Santiago), Eva (Geena Román), Josette (Alma Gormedino), Nacha (Penélope Guerrero) y Renée (Keyla Òdena) son la versión ficcionada del documental Vestida de azul, mujeres trans que se pusieron delante de la cámara para que se viese una realidad que, en la España de la Transición, no era vista con buenos ojos. Mujeres para las que aquella película, que llegó a estrenarse en el Festival de Cine de San Sebastián de 1983, suponía una promesa de fama y, sobre todo, de cambio, que nunca llegó a cristalizar. A pesar de haber ido hasta la ciudad vasca a presentar la cinta documental, ellas cayeron en el olvido. Al menos, hasta que la Valeria Vegas real se interesó por reivindicarlas.
Así, el primer episodio de Vestidas de azul asienta este planteamiento y comienza a narrar sus historias, comenzando con la de Loren (con Bimba Farelo encarnándola de joven y Estrella Xtravaganza acompañándola en sus desventuras) y recordando cómo tuvo que hacer la mili y sus difíciles comienzos en Madrid en un momento en el que la mayoría de las mujeres trans no tenían otra salida que la prostitución.
Como ya hacía Veneno, esta nueva ficción establece un constante diálogo entre pasado y presente, si bien nos aclaran un cartel al principio que una parte es real y otra inventada. Desde las vivencias verdaderas del pasado, se construye un presente (y un futuro) que hable de nuestra sociedad.
En Vestidas de azul no solo encontramos a Valeria Vegas sino a también otros personajes que ya vimos en Veneno, como la siempre ingeniosa Paca "La Piraña" o a Álex Saint como Sacha y otras actrices secundarias.
Pero la mirada diversa de la ficción no solo se expande a través del abanico de historias que hay delante de la pantalla, sino también detrás. En esta ocasión Javier Calvo y Javier Ambrossi solo producen y ceden el rol de guionistas y directores a otras voces: Javier Ferreiro lidera el equipo de guion (también escriben Javier Holgado y Susana López Rubio), Valeria Vegas es una de las productoras ejecutivas y la dirección corre a cargo de Mikel Rueda, Claudia Costafreda e Ian de la Rosa.
No solo eso, se ha puesto especial cuidado en que las personas trans no solo sean parte del relato, sino también quienes trabajen en construirlo: la serie ha formado parte del programa Yes, we trans, de la FELGTBI+, para la inserción sociolaboral de personas trans y en los créditos podemos encontrar representadas funciones como "electriques" u "operadore de cámara"; además de que el guion ha sido revisado por Niurka Gibaja Yábar de Yes, we trans. Sin duda, una apuesta real para que el colectivo LGTBQ+ tome el control de su representación en los medios de comunicación.