BETTY VE TELENOVELAS

Todas las razones para sucumbir a La pasión turca en Atresplayer

La pasión no atiende a razones, pero en el caso de La pasión turca, la nueva serie de Atresplayer, sobran las razones para sucumbir a ella.

Desde que Nova estrenó Fatmagül en enero de 2018 el fenómeno turco se instaló en las pantallas televisivas españolas. Desde entonces han sido muchas las historias, las tramas y los personajes que nos han cautivado. Sin embargo, esa especial relación entre España y Turquía ya fue fuente de inspiración en los años noventa para Antonio Gala. El autor cordobés escribió entonces La pasión turca, cuyo argumento se ha convertido en 2024 en base de una de las series de éxito de Atresplayer.

Un cambio de rumbo

En esta versión más actual y contemporánea, Maggie Civantos interpreta a la protagonista femenina, Olivia, una mujer que viaja a Estambul buscando la tranquilidad necesaria para darle el último empujón al que ha sido el objetivo profesional de su vida: prepararse a fondo para ser profesora titular en la universidad.

¿Y por qué eligió precisamente Estambul? Pues porque es una experta y una enamorada del imperio bizantino.

La pasión turca | atresplayer

Todo transcurre según lo previsto. Olivia se ha preparado a conciencia y consigue su objetivo. Ha llegado el momento de despedirse de Estambul, pero el destino le tenía preparada una inesperada encrucijada.

Una encrucijada que tiene nombre de hombre: Yaman. Porque todos los pensamientos, todas las decisiones y todas las acciones de Olivia vienen determinadas por ese hombre desde el primer segundo en que se cruza con él.

Hasta aquí tampoco habría nada ni preocupante ni criticable. En un momento determinado, una mujer adulta (hecha y derecha, como se diría coloquialmente) decide dar un giro radical a su vida con un único objetivo: ser feliz. Porque Olivia insiste una y otra vez en que ella es feliz en Estambul y, sobre todo y por encima de todo, es feliz con Yaman.

Pero lo que aparentemente era un cambio de prioridades vitales adquiere otro cariz cuando vemos a Olivia ingresada en un hospital y siendo interrogada por la policía.

¿Qué ha pasado? ¿Cómo ha pasado Olivia de ser plenamente feliz en la cama de Yaman a la cama de un hospital? ¿Cómo ha pasado Olivia de ser una brillante profesora a una presunta delincuente? ¿Cómo ha pasado Olivia de mirar intensamente al hombre por el que lo dejó todo a tener la mirada perdida en un mar melancolía?

¿Y quién es él?

Ilker Kaleli es Yaman en La pasión turca | Antena3.com

Y todas esas preguntas, dudas, incógnitas e interrogantes nos llevan al mismo destino: Yaman (Ilker Kaleli), la tentación que Estambul puso en el camino de Olivia para cambiar por completo su destino.

Al igual que le sucede a la hermana de Olivia, nosotros también nos preguntamos quién es Yaman porque, aparte de ser un hombre atractivo, carismático y apasionado, también es inquietante, desconcertante y misterioso. Nos fascina y nos atemoriza a partes iguales.

Cada vez que lo vemos nos pasa algo muy curioso. Comprendemos perfectamente que Olivia decidiese romper con todo y con todos por él. Y, al mismo tiempo, entendemos completamente a su hermana cuando desconfía de ese desconocido que se ha convertido en un pilar clave de su familia.

Porque mientras que Olivia es un libro abierto que transmite todas sus emociones con la mirada, Yaman es un misterio tan complejo como complicado. Es un galante caballero que trata a su dama como una princesa, pero también muestra detalles mucho más oscuros. Por un lado, le da alas para que vuele y triunfe por sí misma, pero, al mismo tiempo, maniobra para que haga y actúe en base a su voluntad.

¿Quién es Yaman? ¿Es solo un vendedor de imitaciones o sus negocios tienen más que ver con antigüedades? ¿Es tan encantador como parece o es un encantador de serpientes que oculta su verdadera personalidad bajo su capacidad de seducción? ¿Quiere a Olivia o solo quiere utilizarla?

La pasión turca - Ep.2 | atresplayer

Turquía vs España

Aunque pueda parecer lo contrario por la intensidad con la que viven su relación, Yaman y Olivia no están aislados en una isla desierta, sino que sus respectivos entornos laborales y familiares también intentan hacer oír su voz en esta historia.

Desde España la hermana de Olivia ha pasado del orgullo a la preocupación. Laura estaba feliz al ver que Olivia conseguía el éxito profesional de la plaza por la que tanto se había esforzado y, por eso, le cuesta tanto entender, asumir y respetar el cambio de rumbo que ha tomado. En una combinación de prejuicios y miedo intenta por todos los medios que Olivia recupere la razón, abandone la locura y regrese al sentido común de una vida normal y corriente como profesora en Madrid.

Ainhoa Santamaría es Laura en La pasión turca | Antena3.com

¿Será capaz de convencer a Olivia? ¿Llegará a comprender en algún momento la decisión que tomó su hermana? ¿Asumirá en algún momento que Olivia es dueña de sus aciertos y de sus errores?

Por otro lado, al igual que sucede con el propio Yaman, el entorno turco también resulta confuso. Y no por razones lingüísticas o culturales. Los ¿amigos? ¿socios? ¿conocidos? de Yaman son tan misteriosos como él, pero mucho menos encantadores. ¿Qué quieren de Olivia? ¿La ven como pareja de Yaman o como experta en bellas artes? ¿Apoyan su relación sentimental o fuerzan un vínculo laboral?

Y, por supuesto, no podemos pasar por alto el tercer entorno que hemos descubierto: el policial, donde también hay perspectiva turca y visión española. Fatma, la policía turca, presiona, con bastante delicadeza todo hay que decirlo, en busca de respuestas que Olivia parece no tener o, quizá, no querer facilitar. La española es una fuente de información de primera línea, pero parece más interesada en ofrecer todos y cada uno de los detalles de su vida íntima que en contestar a otro tipo de preguntas.

Y ejerciendo el papel de poli bueno está Pablo (Fernando Andina), quien, por una de las casualidades del destino, resulta ser el ex novio de Olivia y, además, el candidato con más puntos a cuñado perfecto. Este importante detalle también nos provoca muchas dudas. ¿Es tan perfecto Pablo como se nos hace ver? ¿Estamos ante el clásico cliché de tener que elegir entre el chico perfecto y el chico malo? Pablo también le mintió a Olivia sobre su profesión y la razón por la que estaba en Estambul ¿oculta algo más?

En este punto de la historia, somos capaces de ponernos en la piel de Olivia. Entendemos que no quiera renunciar a ese torbellino de pasión que vive en Estambul, pero un sexto sentido nos avisa de que no somos capaces de ver todo el escenario en su conjunto. Y lo más interesante es que a Olivia le pasa lo mismo. Ella se deja llevar por la pasión, pero también mantiene activa su capacidad para razonar y sabe que algo no encaja, aunque se niegue a admitirlo.

¿Qué oculta Yaman? ¿Por qué ha terminado Olivia en el hospital? ¿Por qué se ha convertido la policía en la tercera en discordia en su relación? ¿Qué decisión tomará Olivia de cara a su futuro? ¿Apostará por seguir viviendo la pasión turca u optará por atender a la razón?