YA EN NETFLIX
Ya se ha estrenado 'Smiley', la comedia romántica LGTBI con Carlos Cuevas y Miki Esparbé, y hemos hablado con ellos sobre toda su experiencia en el rodaje, la presión y esas comentadas escenas de sexo.
'Smiley' ha llegado a Netflix en el momento justo para convertirse en el 'happy place' de las navidades. Carlos Cuevas y Miki Esparbé protagonizan esta historia de amor que adapta un fenómeno venido del teatro y creado por Guillem Clua.
Comparada como "la Heartstopper española", 'Smiley' es la primera comedia romántica LGTBI de producción española y hemos hablado con sus protagonistas sobre lo que ha supuesto para ellos y qué piensan de estas comparaciones con 'Heartstopper', el fenómeno gay de la misma plataforma.
Pero lo cierto es que Miki y Carlos se sienten inmensamente honrados de poder contar esta historia, y están muy orgullosos del trabajo en esos 8 capítulos que giran en torno a las idas y venidas de Álex y Bruno, pero también de muchos más personajes.
Las escenas de sexo de 'Smiley'
Respecto a cómo han afrontado las escenas de sexo, nos cuentan que contaron con dos coordinadoras de intimidad. Un elemento ya fundamental que se está implantando cada vez más en los rodajes. Puedes verlo todo en el vídeo de arriba.
"Lo que nos sorprende es cómo ha llegado tan tarde esa figura al rodaje", reconoce Miki, que ha sido su primera vez y se ha sentido comodísimo.
"Una escena de sexo nunca acaba de ser cómoda de rodar, y quien te diga que sí, miente. Así que estas intermediarias reconfortan mucho, no solo a nosotros, también a quien esté dirigiendo", explica.
Carlos, completamente de acuerdo, añade que es "una figura imprescindible" ya para la industria.
No te pierdas lo que nos contaron también sobre la presión de representar la primera comedia romántica LGTBI en España:
Qué veremos en 'Smiley'
En 'Smiley', Álex (Carlos Cuevas) acaba de tener un desengaño amoroso. Se había hecho ilusiones con un chico que, al cabo de pocas semanas, le ha hecho un ghosting de manual. Y eso no le sienta bien. Coge el teléfono y se dispone a pedir explicaciones con un mensaje de voz que tendrá consecuencias de lo más inesperadas… porque se lo acaba mandando por error a Bruno (Miki Esparbé), a quién no conoce de nada. Ese inocente primer equívoco es el primero de una cadena de acontecimientos que cambiará la vida de Álex y Bruno para siempre.