NÚMERO DE SERIE
Elliot, el protagonista de Mr. Robot, vive desconectado de la realidad. Sufre alucinaciones, pero en lo suyo es el mejor. Su obsesión por erradicar un sistema nocivo hace que empaticemos con él, pero no todos los hackers de las series televisivas tienen tan buenas intenciones. Elegimos a los cinco informáticos de la ficción televisiva cuya rebeldía hace dudar al espectador: ¿son villanos o héroes con un ordenador?
Mr. Robot
Héroe
Sam Esmail se inventó a Elliot Alderson, una especie de álter ego, cansado de la imagen negativa que mostraba el cine de los hackers. Interpretado de forma magistral por Rami Malek –ganador de un Emmy por este papel–, Elliot es un Dexter del hackeo, persigue a cibercriminales, sin importarle el dinero, sólo hacer el bien. Su voz en off adentra poco a poco al espectador en una visión crítica del mundo que nos rodea y que aceptamos impasibles, como sedados. Además de justiciero, hace gala de su inconformismo, prácticamente sin saberlo (y éste es el gancho de la trama), al liderar un movimiento antisistema (Fuck Society) que pretende acabar con una empresa (Evil Corp) que, asegura, es el origen del Mal. En la tercera temporada que ahora se estrena, Elliot deberá enfrentarse a las personas que le han utilizado, entre ellas, su propio padre (Christian Slater), paradójicamente, fruto de su imaginación.
Halt and Catch Fire
Heroína
Cameron Howe, una joven espigada, con el pelo muy corto, peinado hacia delante y teñido de rubio, se sienta frente a la pantalla del ordenador como el que va a la guerra. La actriz Mackenzie Davis –ahora de actualidad por la secuela de Blade Runner– parece interpretar al estereotipo de anarquista, que no se cambia de ropa, egoísta y agresiva. Todo lo contrario. Como ocurre en Mr. Robot, Cameron no aparenta ser el prodigio de la informática que es, una camarera que se pasa las horas muertas jugando a los marcianitos en el bar, pero que es rápidamente reclutada por un ambicioso ejecutivo que ve un raro potencial en ella. Cameron no le da importancia a los convencionalismos básicamente porque no tiene tiempo y prefiere centrarse en encontrar el algoritmo apropiado antes que en pintarse las uñas de negro. Inexperta en el terreno emocional, luchará por trascender con una creación que suponga una auténtica revolución tecnológica.
American Horror Story: Cult
Villano
La séptima temporada de la antología de terror creada por Ryan Murphy se centra en el peligroso mundo de las sectas, tras la victoria en EE UU de Donald Trump. El líder de uno de estos cultos, Kai Anderson, se nos presenta como un joven con grandes dotes de persuasión, un coeficiente intelectual elevado y una extraña habilidad con los ordenadores. No hay efectos paranormales en esta entrega, ni casas encantadas, ni fantasmas o alienígenas, porque el verdadero terror, el que da más miedo, es el que se presenta a plena luz del día, sin artificios. Kai, interpretado por Evan Peters, uno de los actores habituales de la saga, luce el pelo teñido de azul, no ha superado un trauma familiar y transmite esa extraña sensación del que se cree invencible, detalles muy habituales a la hora de describir al estereotipo de hacker peligroso. Kai es un personaje aún más detestable porque consigue arrastrar a un buen puñado de acólitos que le siguen en su locura.
The Strain
Villana/Heroína
Ni blanco ni negro. Guillermo del Toro se sacó de la manga el personaje de una hacker en la adaptación televisiva de su Trilogía de la oscuridad, creada junto a Chuck Hogan. A falta de féminas en el elenco, Dutch Velders representa en la serie a una mujer que sabe que la información es poder, algo que aprendió de su padre, que trabajaba en ciberseguridad. Aunque aquel le enseñó que los hackers son más curiosos que maliciosos, lo cierto es que Dutch comienza cayéndonos mal cuando es contratada por un ex nazi vampiro para sabotear la red de internet de Nueva York. Luego, claro está, se arrepiente, al ver el alcance total de su encargo (poner en peligro la supervivencia de la Humanidad) y pasa de ser una hacker sin escrúpulos a convertirse en parte del grupo de la resistencia que quiere acabar con el Amo, el megavampiro que ha propagado una infección letal que convierte a los humanos en chupasangres.
Mr. Mercedes
Villano
Cerramos este ránking de hackers ambiguos con uno que, desde el principio, sabemos que no es trigo limpio. Mr. Mercedes vendría a ser el reverso de Mr. Robot. A diferencia de Elliot, Brad es un joven perturbado muy peligroso, que se gana el alias de Mr. Mercedes cuando asesina a un grupo de personas atropellándolas con un coche. Sólo lo hace una vez, pero es un caso que obsesiona al detective retirado Bill Hodges, protagonista de la trilogía escrita por Stephen King. Brad Hartsfield, interpretado por Harry Treadaway (Penny Dreadful), trabaja en un local de informática donde disimula su potencial real y esconde en el sótano de su casa un arsenal de ordenadores y software de última tecnología con los que manipular a sus víctimas. Para más inri, y como excusa psicológica de su infame comportamiento, mantiene relaciones sexuales con su propia madre, que ignora la doble vida de su hijo. El hacker más sanguinario que hayamos visto.