La familia de Bob Saget demanda a las autoridades para evitar "un daño irreparable" con los detalles de su muerte
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Los JJ.OO. te transforman en un ente conocido como el ‘cuñao’ olímpico. Este ser se apodera de ti y te convierte en un experto en todas las modalidades deportivas que participan en los juegos. Otro síntoma del influjo de este ‘cuñao’ es madrugar para ver unos octavos de final de ping pong e irte pronto a casa los días de fiesta para no perderte un partido de bádminton que ponen de madrugada. Por cierto los JJ.OO. siguen sin ser en Madrid, otro año será… o no.