EL DADDY DE INTERNET

Pedro Pascal, su dura vida antes de 'The Last of Us': exilio, bullying, desempleo, y ahora es el 'daddy' de Internet

Ahora triunfa con 'The Last of Us' y 'The Mandalorian', pero durante años a Pedro Pascal le costaba pagar el alquiler con sus intermitentes trabajos como actor.

Cada vez que Pedro Pascal aparece en una entrevista o una alfombra roja es una fiesta. Si aparece un vídeo suyo en tu pantalla en TikTok o Twitter, quédate a verlo porque te sacará una sonrisa, siempre dispuesto a bromear y hacer a la gente pasar un buen rato, como cuando hace poco abrazó entre risas el calificativo de "cool slutty daddy" (algo así como "papito zorrón y guay") que le colocan desde el internet más cachondo. Sin embargo, su animosa personalidad contrasta con un pasado duro y una larga lucha por lograr su sueño de ser actor. Los cambios de residencia, el bullying y las penurias de la profesión, además del desprecio por ser latino, han marcado los años previos a que 'Juego de tronos' y 'The Mandalorian' le diesen el estatus de mega estrella.

Pedro Pascal nació en 1975 en Santiago de Chile y, poco después,su familia tuvo que abandonar su país a causa de la dictadura de Augusto Pinochet. Sus padres, José Balmaceda Riera y Verónica Pascal, eran simpatizantes de Salvador Allende y opositores de los militares y ayudaron a algunas personas contrarias al régimen a esconderse, lo cual finalmente les puso en peligro. El matrimonio, que por entonces tenía dos hijos, Pedro y su hermana Javiera, pidió asilo en la embajada de Venezuela y fueron llevados hasta Dinamarca primero y después a Estados Unidos para establecerse en la ciudad de San Antonio, en Texas (sus otros dos hermanos, Nicolás y Lux, nacerían en suelo norteamericano). El exilio es algo que le une a la biografía de su personaje en 'The Mandalorian' y, en cierto modo, también tiene algo que ver con 'The Last of Us', donde los personajes tienen que huir de los regímenes neofacistas de FEDRA.

Indira Varma y Pedro Pascal en 'Juego de Tronos' | HBO

Sus primeros años en California no fueron fáciles. Aunque salió de Chile con apenas nueve meses y, por tanto, su educación fue en Estados Unidos, allí era percibido como parte de una familia de inmigrantes y exiliados, en definitiva, como diferentes. Cuando Pedro tenía diez años, la familia Balmaceda-Pascal se trasladó a Orange County, en California, un tiempo que el actor ha calificado como "dos años realmente duros, con un montón de bullying". Si bien no ha entrado en más detalles, sí ha expresado qué fue lo que le salvó: su madre le apuntó en una escuela secundaria de artes y se empezó a interesar por el cine y el teatro, que se convirtieron en su nueva obsesión y vía de escape. Y, en concreto, ver una representación de 'Angels in America' dijo que le cambió por completo.

Después, Pedro Pascal se mudó a Nueva York para estudiar interpretación y empezó a conseguir algunos pequeños papeles en series de televisión. Por ejemplo, con 24 años se metió en la piel de Eddie, un vampiro que aparece en el primer episodio de la cuarta temporada de 'Buffy, cazavampiros' y al que la protagonista tuvo que hacer frente. También apareció en 'Tocados por un ángel' o 'Policías de Nueva York', aunque en aquella época era acreditado como Pedro Balmaceda (su nombre completo es José Pedro Balmaceda Pascal) o como Alexander Pascal (este lo eligió por 'Fanny y Alexander', la película de Ingmar Bergman).

Pedro Pascal en 'The Last of Us' | HBO

Sin embargo, la pérdida de su madre, que se suicidó en 1999, sería la razón por la que cambiaría finalmente de nombre artístico, como homenaje a ella, aunque también por la dificultad de los yanquis para pronunciar Balmaceda, según el actor. Este suceso llevó a Pedro a un punto oscuro de su vida; perdió a su agente, no encontraba trabajo como actor (recuerda que a los actores latinos les encasillaban en papeles de pandilleros) y estaba lidiando con el duelo. También hubo elementos de luz en aquellos días, por ejemplo, conoció a Oscar Isaac, de quien se haría gran amigo cuando ni siquiera podían pagar el alquiler con sus irregulares trabajos.

Pero Pedro Pascal no desistió y siguió trabajando en incontables papeles episódicos o de pocos capítulos (apareció en 'Sin rastro', varias series de la franquicia 'Ley y orden', 'Cinco hermanos', 'The good wife', 'El cuerpo del delito', 'CSI', 'Homeland'...) hasta que su gran oportunidad le llegó cuando se acercaba a la cuarentena. Y fue con 'Juego de tronos', claro. Lo curioso es que fue otra actriz famosa y amiga suya, Sarah Paulson, quien le tendió la mano para llegar hasta el papel de Oberyn Martell. Paulson era, a su vez, amiga de Amanda Peet, actriz y guionista casada con David Benioff, showrunner de 'Juego de tronos'. Su carisma y talento en la prueba que mandó en vídeo hicieron el resto y, después, conquistó al mundo entero. De ahí saltó a 'The Mandalorian' y 'The Last of Us' y el resto es historia.