PREPARA LA MALETA
¿No sabes a dónde viajar el año que viene? Apúntate estas series que despertarán tus ganas de visitar varios países europeos.
Outlander, la embriagadora serie de amor y fantasía que nos ha hecho viajar por las Highlands escocesas, se acerca ya a su final. La serie estrena ahora la segunda parte de su temporada 7 en Movistar Plus+, mientras que la octava y última ya ha finalizado su rodaje. Eso sí, aunque los espectadores se despedirán pronto de los actores Caitriona Balfe y Sam Heughan, próximamente se estrenará la precuela Outlander: Sangre de mi sangre.
Pero mientras todo esto sucede, nosotros os proponemos un viaje no solo a lomos del caballo de Jaime, sino por todo lo largo y ancho de Europa a través de esta y otras series. Estas son algunas de las ficciones televisivas que más ganas nos dan de comprar unos billetes de avión y preparar nuestro siguiente viaje para visitar sus localizaciones.
Aunque hay también algunas partes de la serie que se han rodado en Irlanda del Norte, la mayoría de los episodios de Outlander transcurre en las Highlands de Escocia. Nuestra primera parada nos lleva al comienzo de la serie, antes de que Claire viaje en el tiempo: ella y su marido van a la ciudad de Inverness, cerca del Lago Ness, aunque si quieres visitar dónde se rodó este momento de la serie tendrás que ir a otro sitio, un pueblecito llamado Falkland. Incluso, puedes dormir en la habitación en la que se aloja Claire, pero no busques la pensión de la señorita Baird sino el hotel Covenanter.
Hay muchas más localizaciones de estar serie, emitida por Movistar Plus+, que pueden visitarse: Doune Castle, cerca de Stirling, fue utilizado para representar el castillo Leoch (hogar del Clan MacKenzie), Midhope Castle, a las afueras de afueras de South Queensferry, es en la serie Lallybroch, mientras que la cárcel ficticia de Ardsmuir fue recreada en Craigmillar Castle, al sur de Edimburgo.
Y de una serie de aventuras pasamos a otra, también rodada al norte de Europa. Y es que Vikingos fue grabada casi al completo en el condado de Wicklow, en Irlanda, aunque nuestros protagonistas también viajaron con sus barcos a lugares como Islandia o Marruecos. Así, la localización principal de esta ficción es el pueblo de Kattegat, que el equipo de producción decidió asentar junto al lago Lough Tay. Eso sí, no esperes encontrar el pueblecito, porque el decorado fue desmontado hace tiempo.
El río Boyne (cerca de Drogheda) o los lagos Lough Dan y Blessington fueron otras localizaciones naturales que aparecieron en la serie, así como la playa de las Monjas en Ballybunion y la de Silver Strand, donde se rodó la expedición de Ubbe que paraba en una cueva. Por supuesto, no te puedes despedir de Irlanda sin ver su famosa cascada de Skógafoss que también aparece en la serie.
Del norte nos movemos al Mediterráneo para pasar unos días paradisíacos frente al mar junto a un impostor con mucho encanto. Si por algo destaca Ripley, la adaptación de la famosa novela El talento de Mr. Ripley de Patricia Highsmith escrita y dirigida por Steven Zaillian ('The Night of), es por sus lugares retratados en blanco y negro, que incluyen también localizaciones de Roma, Nápoles y Venecia.
Mientras que la novela transcurre en un pueblo ficticio llamado Mongibello, para la serie se eligió el pueblo de Atrani y se mantuvo su nombre. Este, situado en la costa amalfitana, destaca por su playa flanqueada por unos grandes arcos y por sus estilizadas casas dispuestas en empinadas cuestas y escalinatas. Sin embargo, la casa donde se aloja el protagonista, la de su amigo Dickie, se encuentra en la realidad en la isla de Capri: se llama Villa Torricella y se puede reservar para alojarse en ella (eso sí, os advertimos que no es barata).
Con permiso de la community manager más pizpireta de Netflix (sí, Emily en París), la mejor compañía para viajar por Francia a través de las series es la de Assane Diop, protagonista de la serie Lupin. Esta ficción, también de la plataforma de la ene roja, nos muestra la cara más estilizada de la capital gala, recorriendo junto al ladrón de guante blanco museos y palacios.
Por ejemplo, uno de los escenarios más memorables de la serie es el robo que tiene lugar en el Museo del Louvre, pero también vemos La Torre Eiffel, la Place Vendôme, los Jardines de Luxemburgo, el Mercado de las Pulgas de Saint-Ouen o el histórico barrio de Le Marais con sus edificios de época y ambiente bohemio.
Otra de las series más populares de Netflix, The Witcher, nos invita a viajar por varios países europeos. Basada en los libros de Andrzej Sapkowski, presenta una historia de fantasía que, aunque se desarrolla en un mundo ficticio, utiliza varios lugares europeos para dar vida a sus paisajes. El lugar principal de rodaje de la serie ha sido Budapest (Hungría), aunque muchos de los sitios que vemos son decorados creados dentro de estudios y, por tanto, no son visitables.
Que no cunda el pánico, muchos otros sí los podéis encontrar y visitarlos. Por ejemplo el patio de la casa del mago Stregobor está dentro de la iglesia neogótica Jáki kápolna, mientras que en el Szentendre Skanzen Village Museum (un museo al aire libre) fue donde se recreó el pueblo de Yennefer, o el castillo Kreuzenstein, cerca de Viena, inspiró el castillo de Vizima, aunque en la serie aparece retocado. ¿Y qué pasa con Canarias? Pues aparece en The Witcher, en concreto cuando vemos la escuela Aretusa (el Hogwarts de la serie): que se creó digitalmente encima del paisaje del Roque de Santo Domingo en Garafía, en la isla de La Palma.