TRAS LARGAS JORNADAS
El rodaje de 'Miércoles' se le hizo cuesta arriba a Jenna Ortega, tal y como ha revelado en una entrevista. La actriz, que tuvo que superar el covid en plena filmación, ha contado que además lloró "histéricamente" después de las largas jornadas de trabajo.
Jenna Ortega deleitó tanto a sus fans como a los de Tim Burton y la familia Addams en 'Miércoles'. La serie fue todo un éxito de Netflix, la cual se frotó las manos después de los bailes virales que inundaron las redes sociales imitando a la ya mítica escena de la actriz.
Sin embargo, a pesar de la sensación por parte del espectador de estar viendo a Jenna Ortega en su salsa con este personaje, incluso haciendo sus propias acrobacias, lo cierto es que la intérprete pasó por una crisis emocional, tal y como ha confesado en una entrevista.
El sufrimiento de la protagonista de 'Scream' vino dado por las largas jornadas de trabajo y exigente rodaje de la serie: "Era llegar al set dos horas antes, trabajar ese día entre 12 y 14 horas, luego ir a casa y conectarme a Zoom para atender a cualquier lección que tuviera", ha dicho a Variety.
"Si no, era llegar a mi apartamento y mi profesor de violonchelo ya me estaba esperando", ha comentado sobre el aprendizaje de este instrumento para la escena de 'Paint it Black', la cual fue especialmente difícil de aprender ya que Jenna tuvo que cambiar de profesor tras mudarse a otro país para el rodaje.
"No dormía nada. Me tiraba del pelo. Hay muchas llamadas de FaceTime que mi padre respondía en las que yo estaba llorando histéricamente", desveló la actriz.
Junto a ello, la intérprete de 20 años aseguró hace unos meses que en su muy compartida escena de baile estaba medicada a causa del covid, que más tarde se enteró que tenía.