Muchas veces, para que una serie logre engancharnos, tienen que pasar cinco o seis capítulos, entre que nos descubre la trama y las relaciones entre los personajes. Una vez enganchados, no deseamos otra cosa que la emisión de un nuevo episodio que sacie nuestro mono seriéfilo. Sin embargo, existen algunas series que no sólo nos han eclipsado en el primer minuto, sino que además han sabido presentar la línea argumental en apenas sesenta segundos de secuencia. Recopilamos los mejores inicios de series, esos que consiguieron ponernos los pelos de punta nada más comenzar.