BETTY VE TELENOVELAS
2025 ha dado sus primeros pasos y a estas alturas ya hay algunos personajes de series turcas con muchos puntos para convertirse en protagonistas de este año.
Durante los últimos meses hemos dado la bienvenida a nuevas series turcas, con sus respectivos nuevos personajes. Este tiempo ha sido suficiente para que se hicieran un hueco en nuestra casa cada vez que nos sentamos ante la pantalla y en estos primeros compases de 2025 ya podemos intuir que algunos de ellos serán protagonistas de grandes momentos (buenos, malos y regulares) a lo largo de este año.
Entre los personajes más destacados que hemos conocido en los últimos meses hay varias mujeres que han visto cómo sus vidas han dado un giro de 180 grados.
Por un lado, tenemos a Bahar (Demet Evgar), la protagonista de Renacer, quien, tras afrontar una grave enfermedad y comprobar el poco cariño que siente su marido por ella, decidió dejar a un lado su faceta como ama de casa y retomar su sueño de juventud: ser médico.
Por lo tanto, Bahar afronta cambios desde una doble perspectiva. Por una parte, se ha convertido en médico residente a una edad a la que ya debería ser una especialista con amplia experiencia y, además, lo hace a las órdenes de su marido y ocultando ese parentesco. En este ámbito, Bahar tiene que autoconvencerse de que es más que capaz de afrontar ese nuevo reto. Y, además, también debe esquivar las zancadillas de aquellos a quienes estorba en el hospital.
Por si esta situación no fuese lo suficientemente estresante, Bahar también debe asumir que su matrimonio hace aguas. La primera señal fue el patético comportamiento de su marido durante su enfermedad y la segunda es descubrir que su ex novia lleva años siendo su compañera de trabajo. Y aún tiene que confirmar algo que su subconsciente ya intuye: su marido y su ex novia han retomado su antigua relación.
Otra mujer que también ha visto su vida totalmente alterada es Seyran, personaje que interpreta Afra Saraçoğlu en Una nueva vida. En este caso, ha pasado de ser una joven que vive sometida a la tradición impuesta por su arcaico padre a la esposa de un rico heredero con especial apego a la fiesta. Además, a diferencia de Bahar, Seyran no tuvo la oportunidad de elegir. Fueron otros los que decidieron que su futuro pasaba por ser la esposa de Ferit y a nadie le importó su opinión.
Ahora intenta adaptarse a esa nueva posición. Con Ferit, la relación es una continua montaña rusa. Hay días que son compañeros. Otro son cómplices. A veces son hasta amigos. Y en ocasiones da la impresión de que pueden llegar a dar un paso más como pareja. La duda está en saber si lograrán encontrar el lenguaje común con el que comunicarse para situarse en la misma sintonía al mismo tiempo.
Y, por otra parte, Seyran tampoco quiere renunciar a sus propios sueños. No quiere limitarse a ser la nuera de una rica familia y dedicarse a sentarse a ver el Bósforo desde la terraza. Seyran tiene aspiraciones, tiene su propio criterio, sus propias opiniones y quiere tomar sus propias decisiones. ¿Conseguirá hacer oír su voz en la gran jaula de oro en la que pretenden encerrarla?
Mientras que estas mujeres están intentando tomar el control de sus vidas, los personajes masculinos están afrontando otras revoluciones. Ellos también deben enfrentar cambios, pero algunos o aún no se han enterado de que tienen que evolucionar o se aferran a una realidad que ya no existe.
En Una nueva vida tenemos a Ferit (Mert Ramazan Demir), el chico de oro que aceptó casarse a regañadientes con una desconocida con la condición de que podría seguir viviendo a su manera. Sin embargo, Ferit se ha encontrado con que la chica de provincias con la que se casó tiene mucha más personalidad y más carácter de lo que esperaba y no está dispuesta a reírle las gracias y sentarse a esperarlo sin más.
Ferit es un personaje contradictorio. Hay momentos en que parece todo un príncipe azul y se comporta como un firme candidato a buen marido, pero en otras ocasiones actúa como un niño malcriado que no quiere que nadie toque sus juguetes. Es capaz de proteger a Seyran, pero, al segundo, se convierte en un aprendiz de Kazim tratándola con una crueldad intolerable. Dice que quiere lo mejor para Pelin, pero actúa como un controlador que no puede soportar que su novia de siempre aparte los ojos de él para mirar hacia otro hombre.
¿Cuál es el auténtico Ferit? ¿El hombre que intenta formar una familia con Seyran o el que deja plantada a su mujer para ir a ver a su amante?
Y si Ferit tiene un problema con su doble vida, Timur en Renacer tiene un máster en esa cuestión. Está casado con Bahar y tiene una aventura con Rengin. Y como todo buen infiel, las engaña y manipula a las dos. A Bahar la retiene a su lado minando poco a poco su autoestima al poner en duda su capacidad para hacer algo más que limpiar y cocinar. A Rengin la retiene a su lado con la promesa siempre incumplida de que un día dejará de ser la otra para ser la titular.
¿Llegará el día en el que Timur tenga que tomar la gran decisión de su vida? ¿Será capaz de dejar a Bahar por la mujer de la que aparentemente lleva enamorado toda la vida? ¿Qué será más importante para Timur? ¿Estar al lado de la mujer que quiere o conservar el patrimonio familiar?
Otros dos personajes que pueden darnos grandes sorpresas son dos mujeres que están en etapas vitales totalmente diferentes, pero que tienen ante sí un futuro inesperado. Por un lado, Hattuc, la tía de Seyran en Una nueva vida, se ha reencontrado con Halis, su amor de juventud y parece que ambos no descartan recuperar el tiempo perdido. Su relación es muy respetuosa con las buenas costumbres, pero sus miradas y sus sonrisas nos muestran a la pareja que un día quisieron ser. ¿Estarán a tiempo de recuperar sus planes de juventud?
Mientras, en Renacer, Parla tiene la oportunidad de provocar una auténtica tempestad revelando la gran mentira que es su vida. Tiene todos los datos y ya ha demostrado que le sobra voluntad para dar un paso adelante y hacer público el romance de su madre y Timur. ¿Seguirá adelante? ¿Será Parla quien prenda la mecha que cause la gran explosión que todos esperamos?