El impactante look de Eduardo Casanova en los Goya con un collar de diamantes que ya quisiera Kate Winslet en 'Titanic'
DOWNTON ABBEY, MEJOR MINISERIE
La familia Prichett está de celebración. La serie Modern Family arrasó en la 63ª edición de los Premios Emmy, llevándose a casa 5 galardones, entre ellos eld e Mejor Comedia. La serie de la ABC partía como favorita, copando las nominaciones de intérpretes de comedia, en las que el matrimonio Dunphy (Julie Bowen y Ty Burrell) ganaron los premios a mejor actriz y actor secundario de comedia.
La serie también convenció a los miembros de la Academia de la Televisión, entidad organizadora, que la votaron como ganadora para los galardones mejor guión y mejor dirección en comedia.
'Modern Family' revalidó el título de mejor comedia que consiguió por primera vez en 2010 mientras que 'Mad Men' se mantuvo como el drama dominante por cuarto año consecutivo, a pesar de que en esta ocasión apenas se alzó con un par de premios de los 19 a los que optaba. A pesar de llevarse el premio a la Mejor Serie dramática, no logró que su protagonista Jon Hamm recogiese el premio al Mejor Actor, para el que era el favorito y por el que optaba por cuarta vez consecutiva.
MARGULLIES Y CHANDLER, MEJORES INTÉRPRETES
El galardón de Mejor Actor de Drama fue a parar a manos de Kyle Chandler, protagonista de 'Friday Night Lights', una de las sorpresasa de la noche. La otra fue Melissa McCarthy, quien se llevó contra pronóstico el premio de Mejor Actriz de Comedia por 'Mike & Molly'. McCarthy aparecía en las quinielas por detrás de Amy Poehler ('Parks and Recreation') y Laura Linney ('The Big C').
Julianna Margullies recogió por fin el máximo galardón para un actriz de televisión tras haber estado nominada el pasado año y haber ganado el Globo de Oro a la mejor actriz dramática este mismo año. Su papel de Alicia Florrick en The Good Wife fue reconocido así arrebatándole el premio a Elisabeth Moss ('Mad Men') y Mirelle Enos ('The Killing'), dos de las favoritas para el premio este año.
Quien repitió galardón fue Jim Parsons, protagonista de The Big Bang Theory, que subió al escenario por segundo año consecutivo a recoger el Emmy como Mejor Actor de Comedia, a pesar de que todo parecía apuntar a una victoria de Steve Carell por 'The Office'.
DOWNTON ABBEY, MEJOR MINISERIE
Downton Abbey y Boardwalk Empire fueron la cara y la cruz. La serie británica de la ITV triunfó en las categorías técincas entregadas hace una semana y anoche subió al escenario hasta 3 veces: Maggie Smith fue reconocida como mejor actriz secundaria de TV movie, Julian Fellowes recogió el Emmy por su guión original y Mejor Miniserie. Los premios a los mejores actores de miniserie fueron a parar a las manos de los protagonistas de 'Mildred Pierce', Kate Winslet y Guy Pierce.
Sabor amargo el que se llevó Boardwalk Empire, serie dramática que empezó la ceremonia con 7 premios técnicos ya en el bolsillo y que se tuvo que conformar con sumar tan sólo uno más, que fue a las manos de Martin Scorsese, quien logró el primer Emmy de su carrera por la dirección del episodio piloto de esa serie.
Steve Buscemi se quedó sin Emmy como Mejor Actor. Quien sí subió a recoger el galardón al Mejor Actor secundario de Drama fue Peter Dinklage por su papel de Tyron Linnester en Juego de Tronos. La versión femenina de este galardón fue para Margo Martindale, por 'Justified'.
La 63 edición de estos premios tuvo como maestra de ceremonias a la actriz de la serie 'Glee' Jane Lynch y contó con un nutrido grupo de presentadores para anunciar los premios de entre los que destacó Charlie Sheen, actor que fue recibido con una ovación por sus compañeros de profesión después de su polémica salida de 'Two and a Half Men'. Sheen, que fue despedido de la serie este año por sus salidas de tono relacionadas con su afición a las fiestas y el uso de drogas, aprovechó el momento para desear "lo mejor" a sus excompañeros de cara a la próxima temporada del programa en el que fue sustituido por Ashton Kutcher. Un gesto que fue seguido por una fotografía en la que posaron juntos Sheen y Kutcher entre los bastidores del teatro Nokia y que llegó a Twitter en lo que pareció simbolizar el traspaso de poderes entre ambos intérpretes.