Leo Harlem presenta la comedia 'Como Dios manda' en el Festival de Málaga: "El humor tendría que ir por la seguridad social"

'Como Dios manda' ha mostrado su primer adelanto en el Festival de Málaga, ciudad natal de su directora Paz Jiménez. La cineasta rodó gran parte de su ópera prima en la ciudad y ahora vuelven para presentarla al público.

La película está protagonizada por Leo Harlem y es una comedia divertida, fresca y optimista, con un mensaje social de inclusión muy necesario. Maribel Salas, Stéphanie Magnin, Daniel Pérez Prada, Julián Villagrán, Santiago Ugalde, Pepin Tre y María Morales completan el reparto.

Leo interpreta a Andrés Cuadrado, y en palabras del actor "es una persona del siglo XIX, que es donde vive él anclado con su historia, y pasa a ver que existen otras personas en el mundo y cambia totalmente su perspectiva de la vida", explica.

La premisa de la cinta parte de que este personaje conservador tiene un desafortunado enfrentamiento y es trasladado al Ministerio de Igualdad.

La comedia, muy necesaria en los tiempos que corren

Según nos cuenta Harlem, "yo siempre he dicho que el humor tendría que ir por la seguridad social. Porque siempre viene bien, pero especialmente en situaciones como las que vivimos ahora que llevamos un cúmulo de noticias y conflictos que entonces, un poquito de comedia viene bien para sanear un poco la mente y tomar aire. Es como ventilar la casa: de vez en cuando hay que hacerlo", reflexiona.

Sobre qué podemos esperar de 'Como Dios manda', añade:

"Es una película con un gran fondo de humanidad, que tiene un poso, aparte de que te rías, tiene un mensaje bonito, cordial y muy positivo para la gente. Una película que el que la vea se va a sentir reconfortado".

Sinopsis de 'Como Dios manda'

Andrés Cuadrado es un funcionario chapado a la antigua. Conservador y algo machista, se toma su trabajo en el Ministerio de Hacienda muy en serio. Se considera ante todo una persona "como dios manda" y, en consecuencia, da por sentado que todo responde a un orden natural, jerárquico e inamovible.

Tras un desafortunado enfrentamiento con una compañera de trabajo, Andrés es sancionado y trasladado al Ministerio de Igualdad. Allí todo es totalmente nuevo para él: no hay sitios asignados, no hay horarios, y todo el mundo es vegano. Andrés tendrá que ponerse al día en muchas cosas para adecuarse a ese nuevo orden de las cosas.

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