A LA ESPERA DE JUICIO
El mediático caso de Sean 'Diddy' Combs está salpicando a muchos famosos que acudían a sus fiestas o tenían amistad con él. Entre ellos, gente como Leonardo DiCaprio.
Si hay un huracán que está azotando actualmente al mundo de las celebrities norteamericanas, ese es sin duda el escándalo de Sean Combs, también conocido como Diddy o Puff Daddy.
El rapero y productor estadounidense, actualmente en la cárcel a la espera de juicio, se enfrenta a graves acusaciones relacionadas con crímenes sexuales, pero todo apunta a que no caerá solo: la gran incógnita es quién y cuánto será salpicado por el caso. Nombres como los de Beyoncé, Leonardo DiCaprio o Ashton Kutcher han salido a la palestra por una u otra razón (lo cual no significa que estén implicados). Él podría enfrentarse a cadena perpetua.
Empecemos dando un poco de contexto sobre el caso. Sean Combs era una persona muy bien posicionada en la industria discográfica, mentor o cercano de varios cantantes y raperos como Usher o Justin Bieber, y alguien conocido como un fiestero profesional entre el famoseo yanqui. Era famoso por organizar las White Parties en el Labor Day (festivo en EEUU, equivalente al Día del Trabajo) donde la gente más top de la música, el cine y la televisión acudían todos vestidos de blanco al evento en los Hamptons. Hasta ahí, normal.
Eran, eso sí, fiestas de excesos. Gente guapa, música, mucho alcohol y otras sustancias. Y sexo. No habría nada de malo, claro, si el sexo fuese consentido. Pero tanto en estas White Parties, como en otras más salvajes denominadas Freak off Parties, parece que no era así. Diddy ha sido acusado por más de 120 personas por agresión sexual. Uno de los testimonios más recientes en salir, por ejemplo, es el de una mujer que habría insinuado que el rapero tenía algo que ver con el asesinato de Tupac y, en respuesta, fue brutalmente violada por él.
No solo eso, Puff Daddy también está acusado de gestionar toda una red de captación de menores, tanto varones como mujeres, para ser prostituidos en sus fiestas. Algo de lo que, se sospecha, no todos pero sí muchos asistentes a sus fiestas conocerían (ya que esas actividades de explotación sexual podrían suceder en habitaciones más privadas al margen de la fiesta principal). Y ahí es donde muchos medios de comunicación americanos (y también mucha gente aficionada a las teorías de la conspiración en internet) se han puesto a tratar de arrojar luz sobre quién podría estar implicado. Los cargos que pesan sobre el rapero son los de "tráfico sexual, trabajo forzado, secuestro, incendio provocado, soborno y obstrucción de la justicia".
"Si estás soltero, probablemente no haya una persona más grande en el mundo con quien pasar el rato", decía Ashton Kutcher sobre Puff Daddy en el programa The Late Late Show en 2020. Ambos se conocían de coincidir en MTV y compartían juergas. "Hay muchas cosas que no puedo contar. Las estoy repasando... Historias de fiestas muy curiosas...", decía un año antes en Hot Ones. Declaraciones que, vistas desde la perspectiva del presente, han llamado ahora la atención, si bien Kutcher no está siendo investigado.
Kutcher no es el único famoso que, en el pasado, ha hablado de una forma "divertida" de lo que sucedía en las fiestas del rapero. "Abrías una puerta y veías a alguien haciéndolo o a varias personas haciendo una orgía en una habitación. Nunca sabías qué iba a pasar", dijo Usher en otra ocasión. "En esta fiesta creo que la mitad de la gente estaba desnuda", comentó Khloé Kardashian sobre una fiesta de 2014.
Su hermana, la famosa influencer Kim Kardashian, también tiene conexión con el caso por vía de su exmarido, Kanye West, quien ha sido acusado por una exasistente llamada Lauren Pisciotta de haber sido drogada y abusada sexualmente durante una sesión de estudio con West y Diddy (en este caso, Sean Combs no está directamente acusado).
Medios como Page Six señalan que, como es bastante probable, Puff Daddy no habría actuado solo, sino o bien con la colaboración o bien con el silencio cómplice de mucha gente, en especial de destacados miembros de la industria musical, como presidentes de discográficas, managers y artistas.
Por ejemplo, Beyoncé y su marido Jay Z están siendo blanco de una teoría conspirativa que apuntaría a que estarían en el ajo en todo lo a sus fiestas y señalan el silencio de la pareja respecto al caso. Incluso, la cantante Jaguar Wright acusó hace unos días a la pareja de tener "cientos de víctimas" en el programa de Piers Morgan, si bien se trata de un espacio sensacionalista que, tras una advertencia legal, tuvo que retractarse.
En cuanto a Leonardo DiCaprio y otras celebridades, la sombra de la sospecha aparece por el hecho de haber asistido a las fiestas de Puff Daddy, como hicieron también Jennifer Lopez, Will Smith, Sarah Jessica Parker, la fallecida Aaliyah, Paris Hilton, Pamela Anderson, Tommy Lee o Mariah Carey, entre otros muchos. Pero, insistimos, solo se sabe eso: que asistieron a una fiesta, no que cometiesen ninguna actividad fuera de la ley.
De DiCaprio incluso han salido fotografías en esas fiestas a finales de los noventa y principios de los dos mil, pero su equipo de abogados ha salido al paso para aclarar su inocencia: "Eran grandes fiestas en casas. Leo estaba empezando su carrera en ese momento y ya había dejado atrás las fiestas. Él no tiene nada que ver con ese mundo, así que es ridículo que alguien suponga que se verá involucrado en esto basándose en unas cuantas fotos granuladas que tienen más de 20 años. Leo está centrado en su carrera y su relación y no piensa en absoluto en el caso federal de Diddy, con el que no tiene nada que ver".
Sin embargo, el huracán de teorías de la conspiración que ha generado internet ha sido imparable, a cada cual más loca y apuntando en muchísimas direcciones con nombres y apellidos pero, de momento, sin ninguna prueba ni fundamento. Habrá que ver qué pueden demostrar los tribunales y en qué queda todo este asunto.