PROBLEMAS DE HOLLYWOOD
Dos Cazafantasmas acabaron sin hablarse por culpa de otra película, también se pelearon dos estrellas de Fast and Furious o los protas de Mad Max. Repasamos jaleos y enfados que sucedieron en los rodajes de películas muy conocidas.
Los rodajes de Hollywood pueden ser un caldo de cultivo para tensiones y egos, y algunas películas (por exitosas que fueran) tuvieron muchos problemas por la relación entre sus actores.
Seth Rogen y Evan Goldberg, amigos desde la infancia y cineastas que suelen trabajar juntos, se caracterizan por un humor gamberro que hemos visto en películas como Supersalidos o La fiesta de las salchichas o la serie Preacher. Para Juerga hasta el fin también hicieron de las suyas y reunieron en el elenco a un montón de estrellas, pero no todas tenían la misma gana de desfase. Según filtró un extra, había una escena en la que Channing Tatum aparecía con un tanga de cuero y en la que salía también Emma Watson. Ella no parecía estar muy cómoda con aquello, especialmente cuando el actor se puso a improvisar un baile muy cerca de ella. La actriz conocida por encarnar a Hermione salió enfadada del set de rodaje y se dio por concluida la jornada. Posteriormente, Seth Rogen confirmó que aquello sucedió, pero le quitó hierro al asunto.
"Martin Scorsese, gran director, quería reunirse conmigo para una película con Al Pacino, Joe Pesci, Chris Walken y Robert De Niro, pero el responsable de casting le dijo a mi manager que Robert De Niro dijo que se negaba a trabajar conmigo", aseguró Mickey Rourke en el programa italiano Non è la D'Urso. Se refería al film El Irlandés, y añadió que ese bloqueo le dolió mucho porque estaba en números rojos en ese momento. Sin embargo, los productores de esta cinta aseguraron que jamás se barajó su nombre para el reparto. Rourke mantiene que la animadversión de De Niro viene de lejos, concretamente de cuando coincidieron en la cinta El corazón del ángel, en cuyo rodaje este se habría negado a hablar con Rourke en todo momento, ni siquiera saludarse, por sus personajes. Mickey dice que fue una decisión que le resultó muy desagradable, ya que admiraba a De Niro hasta ese momento. El actor El Padrino, por su parte, no ha contado su versión.
Vin Diesel y Dwayne Johnson empezaron a coincidir en la saga Fast and Furious en la quinta película de la franquicia de coches, pero fue en la octava cuando tuvieron sus más y sus menos. Todo comenzó con un post de Facebook de The Rock quejándose de un compañero de trabajo (mencionaba que "no sabía comportarse como un hombre hecho y derecho y un verdadero profesional" y le llamaba "candyass", un insulto a medio camina entre "cobarde" y "marica"), sin nombrarlo, aunque luego se supo que se refería a Diesel. En principio, mucha gente pensó que era una estrategia promocional para dar que hablar, pero no. ¿La razón? Los retrasos de Vin Diesel a la hora de llegar al set de rodaje enfadaron a Dwayne Johnson. Incluso, varias escenas de la película en la que aparecen los dos se grabaron por separado y luego se les juntó en posproducción, según confirmó el actor de Jumanji: Bienvenidos a la Jungla. Sin embargo, el tiempo (y el dinero) hace que todo vuelva a su sitio y ambos volvieron a trabajar juntos en la saga.
En la pantalla eran dos Cazafantasmas inseparables, Peter y Egon, y fuera de ella también eran colegas. Tanto que Harold Ramis, quien además de actor era guionista y director, solía recurrir a Bill Murray como su actor fetiche. Y así fue hasta que se pelearon haciendo Atrapado en el tiempo. A pesar de que es una de las películas más recordadas de ambos, hubo fuertes conflictos por visiones creativas diferentes e, incluso, se dejaron de hablar. Ramis aseguró en una entrevista que Bill llegaba tarde al set y tenía muy mala actitud: "Me hubiese gustado decirle lo mismo que le decimos a nuestros hijos: no tienes que montar un berrinche para conseguir lo que quieres, solo dilo". Aún así, la hija de Ramis confirmó que los dos actores se reconciliaron antes de la muerte de su padre.
El periodista norteamericano Kyle Buchanan publicó un libro en el que destapaba lo complicado que resultó el rodaje de la exitosa Mad Max: Furia en la carretera. Al parecer, Tom Hardy y Charlize Theron no se llevaban bien, hasta el punto de necesitar que producción mediase entre ellos. Un día que Hardy llegó tarde al set, Theron se quejó y él se fue hacia ella de forma agresiva e incluso se temió que pudiesen llegar a las manos. Tras el altercado, la actriz pidió tener a una persona de producción siempre con ella como medida de protección y, aunque lograron concluir la película y ambos reconocieron no haber estado muy finos, no quisieron trabajar más juntos.
La película Batman Forever tuvo una gran pelea, pero no entre el superhéroe murciélago y sus enemigos, sino entre dos de los villanos de la historia... detrás de las cámaras. Aunque, para ser justos, uno fue mucho más villano que el otro. Jim Carrey interpretaba aquí a Enigma; eran los años noventa y el actor se encontraba en la cúspide de su carrera gracias a interpretaciones de gestos exagerados y humor. Esto, que a todo el público parecía encantarle, no era plato de buen gusto para otro de los actores de la cinta, Tommy Lee Jones, que interpretaba a Dos Caras. Según contó el propio Carrey en el programa radiofónico de Howard Stern, la noche antes de grabar una escena juntos se encontraron en un restaurante y él se acercó a saludar a su compañero. Lee Jones se levantó y, en vez de devolver el saludo con cordialidad le abrazó y le dijo: "Te odio. De verdad, no me gustas. No puedo aprobar tu bufonada". Lo cierto es que Joel Schumacher, director de la peli, corroboró que Tommy Lee Jones era el malo de la película: "Jim Carrey era un caballero y Tommy Lee se sentía amenazado por él. Estoy cansado de defender a actores demasiado privilegiados y que cobran más de la cuenta", dijo.
Y no podíamos cerrar este artículo sin hablar de la rivalidad más comentada de los últimos años en la industria televisiva yanqui. Por supuesto, hablamos de las actrices de Sexo en Nueva York. Mientras en pantalla veíamos una amistad a prueba de todo, sus intérpretes no se llevaban del todo bien, aunque mantenían una relación más o menos cordial y, después de acabar la serie, incluso se reunieron para hacer dos películas y nadie sospechaba lo que pasaba. Fue cuando se intentó hacer una tercera película cuando saltaron las alarmas: Kim Cattrall, Samantha Jones en la serie, se negaba a volver a hacer a su personaje y, de algún modo, se la vendió como la mala de la historia. Ella fue muy clara diciendo que ya había hecho ese personaje mucho tiempo y que no le había gustado mucho el rumbo que le habían dado a Samantha en las películas.
Pero todo llegó a un punto álgido de tensión cuando Cattrall perdió a su hermano y Sarah Jessica Parker le puso un mensaje de condolencias en Instagram, que la otra no tomó como algo sincero. Contestó públicamente. "Tu continuo acercamiento es un doloroso recordatorio de lo cruel que fuiste entonces y eres ahora. Déjame que deje esto muy claro (si aún no lo he hecho). No eres mi familia. No eres mi amiga. Así que escribo para decirte, por última vez, que dejes de explotar nuestra tragedia para restaurar tu imagen de chica buena". Finalmente, Cattrall no se unió al regreso de la serie, And just like that..., pero sí hizo un cameo en la segunda temporada a cambio de un buen cheque y de no tener que coincidir personalmente con ninguna de sus excompañeras ni con el guionista principal de la serie.