AÚN EN PROCESO DE DIVORCIO
Channing Tatum y Zoe Kravitz se casarán próximamente, pero antes, el actor deberá resolver una cuestión legal con su exmujer, Jenna Dewan, y que tiene que ver con Magic Mike.
Channing Tatum y Zoe Kravitz se comprometieron a finales de 2023 tras dos años y medio de amor. Una boda de la que aún no hay fecha exacta, pero que no impide que ambos estén "muy emocionados" por ella.
Casi tanto como lo está Lenny Kravitz, que guarda una gran amistad con el actor, del que se deshizo en elogios recientemente: "Es un ser humano con mucha alma, es muy educado, tiene modales y clase".
Pero antes de contraer matrimonio, el intérprete deberá resolver el divorcio de su anterior matrimonio con Jenna Dewan. Ambos estuvieron casados durante 10 años, pero en 2018 solicitaron un "aterrador divorcio", como él mismo dijo, del que aún no se han ultimado todos los detalles.
Tal y como ha podido saber People, en una reciente comparecencia ante el juzgado en en medio de su proceso de separación, Dewan pidió al juez que tuviera en cuenta las ganancias obtenidas por el actor tras Magic Mike.
Tatum protagonizó y produjo la primera película en 2012 y sus secuelas, Magic Mike XXL, en 2015 y Magic Mike: El Último Baile, en 2023. Lo que afirma Dewan es que, aunque no aparece acreditada en la trilogía, la producción de la misma fue "realizada y cofinanciada por Channing con fondos matrimoniales", sin que su exmujer viera todos los beneficios pertinentes.
Sus abogados intentan demostrar con esto que el intérprete habría intentado evitar el reparto de los ingresos de esta fuente en el divorcio, algo que su entorno ha negado.
Argumentan que, si bien Magic Mike comenzó durante su matrimonio, él "continuó creándola y desarrollándola desde su separación". "Desplegó grandes esfuerzos desde la separación para mejorar la propiedad intelectual de Magic Mike".