EMMA HEMING WILLIS
Emma Heming Willis ha compartido cómo su familia enfrenta la dura realidad de la enfermedad de Bruce Willis, revelando detalles que van más allá de lo conocido y mostrando la valentía con la que sus hijas han aprendido a aceptar lo inevitable.
La última vez que se habló públicamente sobre la salud de Bruce Willis, su exesposa Demi Moore compartió una actualización que brindó cierto alivio a los seguidores del actor: Willis se encontraba estable, rodeado de su familia y recibiendo el cuidado que necesitaba. Sin embargo, una reciente entrevista de su esposa, Emma Heming Willis, ha arrojado luz sobre la realidad cotidiana de la familia, revelando un panorama más complejo y difícil.
En una reciente entrevista con Town and Country, Emma ha compartido cómo sus hijas, Mabel y Evelyn, han crecido siendo conscientes del deterioro progresivo de su padre. Desde el inicio de los problemas de salud de Willis, que se manifestaron primero como afasia antes de su diagnóstico definitivo de demencia frontotemporal (FTD), la modelo decidió no ocultarles la verdad. "Nunca he intentado endulzarles nada. Han crecido con el deterioro de Willis a lo largo de los años", afirma, resaltando la importancia de no protegerlas de la realidad.
Emma ha explicado que la FTD es una enfermedad que "susurra, no grita", lo que hizo que fuera difícil identificar cuándo comenzó a apoderarse de él. A pesar de que el diagnóstico formal llegó hace dos años, los síntomas estaban presentes mucho antes. "Le diagnosticaron hace dos años, pero un año antes teníamos un diagnóstico impreciso de afasia, que es un síntoma de una enfermedad pero no es la enfermedad", ha detallado.
La modelo también ha destacado para concluir que ha aprendido a hablar con sus hijas de forma honesta, siguiendo la recomendación de su terapeuta: "Si los niños hacen preguntas, están listos para saber la respuesta". Por ello, cuando Bruce enfrentaba momentos difíciles, Heming buscaba que Mabel y Evelyn entendieran la situación, aunque sin entrar en detalles sobre el lado terminal de la enfermedad. "Esta enfermedad es crónica, progresiva y terminal. No tiene cura", señala. Sin embargo, las niñas ya comprenden una de las realidades más duras: "Saben que papá no va a mejorar".
Estas declaraciones de Emma Heming ofrecen una visión profunda de cómo la familia Willis ha enfrentado la enfermedad del actor, con honestidad, fortaleza y amor, mientras navegan por un camino sin retorno.