POR EL CAMBIO DE MENTALIDAD
La actriz Julia Roberts ha querido contestar a algunas de las críticas que se han hecho en los últimos años a Pretty Woman por el cambio de mentalidad y la evolución que ha tenido la sociedad.
En el año 1990 salió a la luz una de las comedias románticas más famosas de la historia del cine: Pretty Woman. Julia Roberts y Richard Gere fueron los encargados de dar vida a una de las historias de amor más recordadas por el público.
Dirigida por Garry Marshall, la cinta logró recaudar 463 millones de dólares en taquilla cautivando con la relación de Vivian (Julia Roberts) y el empresario Edward Lewis (Richard Gere). La influencia de la película en la cultura pop ha sido notable y sus protagonistas continúan hablando de ella a día de hoy. De hecho, Richard Gere llegó a confesar que casi no hace la película, como puede verse en el vídeo de arriba. El problema es que con el paso de los años el concepto ha quedado anticuado por cómo han avanzado la sociedad y su pensamiento.
Con su papel en la cinta, Julia Roberts logró lo que hasta el momento parecía impensable, que es alcanzar la fama con un papel de prostituta. Su talento y carisma en Pretty Woman hicieron que su carrera diese un giro y se propulsase al estrellato. Eso sí, la trama en la que un empresario millonario contrata a una prostituta durante una semana y luego se acaban enamorando, a día de hoy lanza mensajes contradictorios, según ha dicho la crítica en los últimos años. Por ello, en su última entrevista la actriz, que guarda especial cariño a la cinta, ha querido dar su punto de vista sobre el tema.
"Hay muchas películas que, vistas en la actualidad, nos llevarían a hacernos preguntas, a cuestionar el clima de la época en que se hicieron. Incluso si viéramos hoy algunos programas de televisión de cuando yo era joven, nos asombraríamos de lo mucho que nos podían hacer reír algunas cosas. Pero precisamente por ese motivo seguimos contando historias diferentes. Los tiempos cambian", ha comentado a Vanity Fair.
Con esta visión y 34 años después de su estreno, Roberts ha querido dejar claro que todo evoluciona y que la mirada va cambiando. Lo que antes se decía que era una versión moderna de La Cenicienta, ahora es visto por muchos como una película con un mensaje equivocado. Eso no preocupa en absoluto a su protagonista ya que, a pesar de que los años sigan pasando, Pretty Woman continúa siendo una de las favoritas del público.