"ERA P*TO BIZARRO"
Dakota Johnson se ha convertido en una de las actrices más queridas de su generación, pero es imposible olvidar el boom que la lanzó a la fama con su papel en 'Cincuenta sombras de Grey'. Ella siempre ha sido muy sincera sobre su experiencia en la saga, y cuenta los momentos menos agradables de las escenas más hot.
Ahora es una de las intérpretes más codiciadas de Hollywood, pero el público siempre recuerda el pasado de Dakota Johnson en la saga 'Cincuenta sombras', que tantísimo éxito cosechó.
La trilogía erótica basada en los libros de E.L. James fue un fenómeno sin igual, y catapultó las carreras de Jamie Dornan y Dakota Johnson, que desde entonces ha tenido una interesante carrera.
Johnson ha apostado por proyectos que le han permitido explotar su potencial y mostrar muchas facetas, con la sinceridad que le caracteriza y que le ha ganado cierta fama en la cultura popular (desde su cortada a Ellen DeGeneres).
Pero llegar a ese punto no fue nada fácil, y es que los años en 'Cincuenta sombras' tuvieron luces y sombras, nunca mejor dicho, como los protagonistas han reconocido en varias ocasiones.
La actriz se sinceraba conMarie Claire sobre que "nunca se hizo más fácil" ni es nada sexy grabar escenas de sexo, por muy bien que queden después.
"La escena más difícil de lejos, creo que de las tres películas, fue una escena de sexo de la tercera donde estaba esposada de brazos y piernas al cabecero. Es como una valla que baja. Y estaba con los ojos vendados. Y fue un poco un shock, porque no fui consciente de que, no importa cómo de preparada estés o cuánto lo ensayes, cuando te despojan de tus sentidos de esa manera, no puedes controlar la forma en que tu sistema nervioso reaccionará", recuerda Johnson.
Y también revela la desagradable forma en que se 'tapaban' para dichas escenas.
"Tenía como estos tangas sin tiras que tenían pegamento. No es pegamento pegamento, pero se pega". Sin embargo, también revela que el adhesivo no solía tener la fuerza para aguantar todo el rodaje, así que al final acababan usando superglue. "Me ponía dos a la vez. No es doloroso, quiero decir, es apenas nada. Pero supongo que así tienes algo de sensación de estar tapada. Es p*to bizarro", explica.
"La mayoría de nuestra preparación simplemente es averiguar exactamente cómo vamos a conseguir la escena de antemano, para que no haya mucho que esperar después mientras estamos vulnebrales. Pero, si algo es muy muy difícil, a veces es necesario tomarse un chupito de algo fuerte antes", termina confesando la hija de Melanie Griffith.