EN ROBIN HOOD
El actor Russell Crowe ha confesado en una entrevista que descubrió diez años después de que ocurriera que se había roto las dos piernas en el set de rodaje de Robin Hood.
Russell Crowe es uno de los actores más queridos y respetados de Hollywood. Uno de sus papeles más destacados ha sido en Gladiator, interpretando a Máximo Décimo Meridio. 25 años después se está preparando Gladiator 2, aunque todo apunta que el actor no estará en la cinta, incluso ya habló de lo harto que estaba de que le preguntaran por ello. La secuela tendrá grandes estrellas en sus filas, incluida una de Stranger Things, como puede verse en el vídeo de arriba.
En la actualidad, Russell se encuentra promocionando su último proyecto, Land of Bad, un thriller de acción en el que un controlador aéreo con poca experiencia se incorpora a un equipo Delta Force para una misión en Filipinas.
El actor ha concedido una entrevista para hablar de su nueva cinta y ha sido ahí donde ha confesado cómo se rompió las dos piernas y que no fue consciente de ello hasta muchos años después. Charlando con People, Crowe ha contado que se encontraba en el set de Robin Hood en el año 2010 cuando comenzó todo.
Al parecer, él quería aterrizar con las puntas de los pies para una escena, pero lo hizo con los talones en un suelo irregular: "Fue como una descarga eléctrica que recorrió mi cuerpo. Estábamos filmando una película importante, así que te cuesta, pero el último mes de ese trabajo fue muy complicado. Hubo varias semanas en las que incluso caminar fue un desafío".
Ha admitido que nunca le dijo nada a producción: "Simplemente seguí trabajando". Una década después comenzó a tener "dolores muy extraños" en la parte inferior de las piernas, por lo que acudió al médico para que le hiciera una resonancia magnética y una radiografía.
"Pensé que no era nada grave. Después de trabajar durante un largo invierno en Nueva York, a mi cuerpo simplemente le faltaba ejercicio y sol", ha comentado el actor.
Sus pensamientos cambiaron de dirección en cuanto el médico le dijo: "¿Cuándo te rompiste las piernas?". Sobre ese instante, Russel recuerda lo siguiente: "Aparentemente podía ver restos de fracturas en ambas espinillas. Para refrescarme la memoria, me dijo el médico: ¿Habría sido hace quizás 10 años?".
Dicho esto, tardó poco en hacer memoria y recordar su salto en el set de Robin Hood: "Al parecer terminé esa película con las dos piernas rotas. Todo por el arte. Sin escayola, sin férulas, sin analgésicos, simplemente siguieron trabajando y con el tiempo se curaron solas".
El propio Russell recordando aquella época ha admitido que se tomó un año libre y que no volvió a trabajar hasta el año 2013 en Man of Steel: "En retrospectiva, obviamente sabía que algo iba mal. Para ser el padre kryptoniano de Superman fueron seis meses de entrenamiento físico increíblemente intenso. Entre el tiempo libre y ese entrenamiento, las cosas se arreglaron solas".