HACE 6 MESES
Cara Delevingne se ha sincerado en una entrevista reciente donde ha confesado que decidió ingresar en rehabilitación después de publicarse en septiembre de 2022 unas fotos suyas perdida y con un comportamiento errático.
En septiembre de 2022 Cara Delevingne ocupó los titulares de gran parte de los medios internacionales tras publicarse unas fotos suyas en las que se empezó a hablar sobre su salud mental.
En las fotos aparecía la actriz y modelo en la puerta del aeropuerto Van Nyus de Los Angeles en extrañas circunstancias. Cara se movía sin rumbo, con la mirada perdida e iba sin calcetines mientras hacía gestos frenéticos a la vez que hablaba por teléfono y fumaba.
Después, pudimos ver a la actriz Margot Robbie muy afectada tras asistir a visitarla. No era la primera vez que Delevingne atravesaba un episodio de este tipo pero, ahora, la británica ha confesado en una entrevista a 'Vogue' que esas fotos fueron una llamada de atención para decidir que necesitaba ingresar en rehabilitación.
"No había dormido. No estaba bien", dice sobre las polémicas fotos. "Es desgarrador porque pensé que me estaba divirtiendo, pero en algún momento fue como, está bien, no me veo bien. Sabes, a veces necesitas un control de la realidad, así que en cierto modo esas fotos son algo por lo que estar agradecida".
La infancia de Cara Delevingne no fue fácil ya que estuvo marcada por la depresión, el bullying y una infancia marcada por su madre adicta a la heroína. Puedes verlo en el vídeo de arriba. Así, la joven explica que a lo largo de su vida ha ido a terapia pero no ha sido algo que mantenga en el tiempo.
"Tuve intervenciones de algún tipo, pero no estaba lista", afirma. "Ese es el problema. Si no estás boca abajo en el suelo y listo para levantarte de nuevo, no lo harás... No había visto a un terapeuta en tres años. Simplemente eché a todos".
"Siempre pensé que el trabajo debe hacerse cuando los tiempos son malos, pero en realidad el trabajo debe hacerse cuando son buenos. El trabajo debe hacerse de manera consistente. Nunca se va a reparar o curar por completo, pero estoy de acuerdo con eso, y esa es la diferencia", explica.
"Antes, siempre me interesaba la solución rápida de la curación, ir a un retiro de una semana o a un curso para traumatismos, por ejemplo, y eso me ayudó por un minuto, pero nunca llegó al meollo de la cuestión, a las cosas más profundas", sigue diciendo.
Para terminar comentando que ahora se ha sometido a un tratamiento mucho más en profundidad: "Esta vez me di cuenta de que el tratamiento de 12 pasos era lo mejor, y se trataba de no avergonzarse de eso. La comunidad marcó una gran diferencia. Lo opuesto a la adicción es la conexión, y realmente descubrí que en 12- pasó".